Pretextos para no hacer las cosas, hay miles, pero cuando tienes tus objetivos firmes, no hay nada que te detenga, ni siquiera caminar durante una hora y media a temperaturas bajo cero, para poder llegar a tus clases.
Un niño llamado Wang Fuman, camina diariamente 4.5 kilómetros desde su casa a la escuela Zhuan Shan Bao del condado Xinjie, donde cursa el tercer grado, en la provincia de Yunnan, China, y se ha vuelto todo un ejemplo, pues recorrió su ruta habitual ¡pero con una temperatura de 9 grados bajo cero!
Todos los días, este pequeño realiza ese recorrido, sin importar las bajas temperaturas, y además, solo viste un abrigo que no alcanza a protegerlo totalmente del frío, por ello, su historia se ha vuelto viral, luego que su profesor le tomara una fotografía y la compartiera, para mostrar cómo llega cada día, durante la temporada invernal, a sus clases:
Esta imagen es conmovedora y motivadora a la vez, pues es un gran ejemplo el de este niño, que no se deja vencer ante las adversidades y siempre cumple con su responsabilidad de acudir a la escuela.
Como podemos ver, el rostro está rojizo por el intenso frío, además, sus manos están llenas de grietas, por el mismo motivo:
Estaban en época de exámenes finales, así que este pequeño campeón no se podía dar el lujo de faltar, aún a riesgo de quedar congelado en alguna parte del camino, y después, soportar las risas de sus 16 compañeros de clase, al verlo con el cabello y las cejas llenas de hielo.
Sin embargo, a pesar de las adversidades, el director de la escuela aseguró que ante sus compañeros también sonrió al ver cómo se sorprendían por su apariencia congelada.
Además, Wang es un buen estudiante, particularmente bueno en matemáticas, que se esfuerza al máximo para hacer sus tareas y responder a los exámenes, a pesar de tener las manos congeladas…
Vive con su abuela y su hermana mayor en una pequeña choza de barro y ve muy poco a sus padres, ya que son trabajadores migrantes en varias ciudades de China.
Las redes sociales en China ya se han llenado de palabras de aliento para Wang, y no solo eso, sino que se están organizando colectas para conseguirle ropa más abrigadora y tratar de apoyarlo para que tenga mejores condiciones de vida.
Las autoridades de Yunnan han manifestado que también van a colaborar e iniciarán una campaña para ayudar no solo a este niño, sino a otros de la región que estén en las mismas condiciones de pobreza y vulnerabilidad.