Los hombres que se dejan la barba son más hábiles para alejar las tentaciones de las relaciones del mismo sexo, o al menos esto es lo que cree el Metropolitan Kornily, cuyo nombre secular es Konstantin Ivanovich Titov, líder de la Iglesia Rusa de los viejos creyentes ortodoxos, separada de la iglesia católica desde 1666.
De acuerdo con el Moscow Times, el líder religioso recomendó a los hombres que dejaran de rasurarse, para protegerse de la homosexualidad:
Dios nos dio reglas. Está escrito que Dios creó a todos con una barba. Los católicos del oeste han malentendido este concepto. Pero es muy claro: los íconos, no podemos imaginarnos a Cristo o alguno santo sin barba. Uno no se debe de oponer al creador. Es una monstruosidad ver a los hombres cambiar de estilo de peinados y de ropa.
En previas ocasiones, Kornily ha tenido el apoyo y el reconocimiento del presidente ruso, Vladimir Putin (sin barba), pero de momento no se ha mostrado a favor o en contra de las declaraciones.
En la historia rusa, la barba ha sido un tema de discusión constante; por ejemplo, se dice que los zares rusos tenían la piel muy sensible y si se rasuraban podían morir desangrados.
Por otro lado, el zar Pedro I El Grande, en 1698 cobró un impuesto por la tenencia de barba, para obligar a sus súbditos a rasurarse. Esta decisión fue tomada tras hacer un viaje por toda Europa y ver que, en el resto de los países la moda era ir con rostro rasurado.
Los únicos exentos a este impuesto por el atributo masculino fueron los campesinos y los religiosos, quienes podían usar el vello facial completamente gratis.
Ahora, regresando a la Rusia actual, las declaraciones de este líder religioso, recalcan el rechazo de este país hacia la homosexualidad y a conductas que puedan relacionarse con ella.
En recientes fechas, el resto de los mandatarios del mundo, le pidieron a Putin investigar sobre los presuntos campos de concentración homosexual en Chechenia, lugares en donde personas con conductas sexuales sospechosas son encerradas y torturadas.
Legalmente no se tiene ninguna constancia de dichos lugares, pero los reportes de varios medios de comunicación, como The Guardian, del Reino Unido, aseguran la existencia de una purga hacia los homosexuales.
Ni hablar, ahora los lampiños necesitarán usar barbas falsas, si no quieren que se les confunda.