Los actos de bondad vienen de quien menos lo esperas. Una pareja varada en el frío, después de perderse su último tren a casa, se sorprendió cuando un hombre sin hogar les ofreció sus propios medios de calor.
Charlotte Ellis y Taylor Waldon, de 22 años, intentaban volver a casa después de ir de fiesta a Covent Garden, Londres, cuando notaron que ya pasaba de la hora para tomar el tren, así que tuvieron que esperar afuera de la estación hasta que abrieran de nuevo.
Mientras discutían, la temperatura iba bajando y se hacía más noche. A eso súmenle que tenían que pasar cuatro horas afuera del lugar, hasta que abrieran de nuevo.
Fue unos momentos después que Charlotte escuchó la voz de un hombre que les decía: “Pueden usar mi abrigo y edredón, si quieren. Es una larga espera, y esta helando esta noche”.
Charlotte aceptó la oferta de inmediato, saltando bajo el edredón con el hombre, conocido como “Joey”. Ella dice que se sintió tan conmovida por su acto de bondad que no pudo dejarlo ahí a la interperie:
“Nadie merece estar en estas condiciones, no estoy diciendo que debes confiar en todos los que te encuentras en una esquina, pero ¿en quién confiar?”
Charlotte se rehusó a irse sin Joey, así que lo invitó a regresar a casa junto a su novio, para que pasara una noche con ellos, tomara una ducha, se afeitara y tuviera una rica comida.
“Él pensó que estaba bromeando, pero no fue así”.
La pareja invitó a Joey a convivir con ellos y con la familia de Charlotte, en Billericay, Essex. Taylor por su parte dijo: “Hablaron durante horas, intercambiaron historias de vida y al instante se convirtieron en los mejores amigos”.
“Todos mis amigos y familia inicialmente pensaron que estábamos locos. Después de que les presentamos a Joey, todos lo amaron instantáneamente, porque él es, honestamente, un tipo genuino”, dijo Charlotte Ellis.
“Lo hemos llevado por comida india, lo llevamos a que le cortaran el cabello, le dimos un teléfono móvil, mis amigos le dieron un guardarropas nuevo, lo llevan a jugar fútbol, ver películas, jugar videojuegos. El ayuda a mi mamá a alimentar a los caballos.”
Ahora Joy tiene un trabajo, Charlotte le ayudó a conseguirlo, y planea ayudarle a conseguir documentación oficial, como su pasaporte.
“Sólo porque alguien no tiene hogar, no significa que sea menos persona que tú o yo, y no significa que usen drogas o abusen del alcohol. No todas la personas sin hogar deben ser juzgadas, son como nosotros”.
La historia de Charlotte Ellis ha sido compartida más de 1.000 veces, y ahora espera hacer más por las personas sin hogar en Londres, incluyendo repartir bolsas de ropa.
“Estamos absolutamente asombrados y abrumados de que mi historia se volvió viral, sólo espero que la gente le pueda dar un poco de su tiempo a las personas como Joy, eso es todo lo que deseo”.