Millones de animalitos deambulan por las calles del mundo, sin un hogar, sin comida, y también muchas veces sufriendo de abusos por parte de los humanos, lo que los hunde en una profunda tristeza, y podemos encontrarlos en condiciones lamentables… Pero con cariño y cuidados es posible que se recuperen y sean unos fieles y guapos compañeros. Esta es la historia de “Bruce Willis”, un gatito adoptado hace un año, que pasó de ser un guiñapo lleno de tristeza a ser todo un enorme felino, digno miembro de su especie.
Así fue como encontraron al gatito, y es evidente su rostro de tristeza y miedo, y es que cuando lo hallaron en las calles tenía cicatrices prácticamente por todo el cuerpo, dientes rotos, una lesión en el ojo que al parecer alguien le había curado, entre otros problemas, por lo que fue trasladado a un refugio en Minnesota, donde se le brindó un hogar temporal para atenderlo mientras llegaba alguien que quisiera adoptarlo y darle un nuevo hogar y una nueva vida.
Al ver la publicación en Facebook, una chica llamada Sandrah de inmediato se enamoró del minino, pero como en las historias de amor, no todo es tan fácil. La chica solo acudía al refugio a cuidar un rato a “Bruce”, pero luego lo dejaba ahí, ya que en el departamento que estaba rentando está prohibido tener mascotas. Era tanto el cariño que le tomó, que hizo todo lo posible por convencer al casero de que la dejara llevar a su amigo peludo con ella. Luego de un tiempo de arduas negociaciones, por fin lo convenció y así inició el proceso de transformación, que ha sido increíble.
Luego de todo el cariño y cuidados de Sandrah, al final dieron buenos resultados ya que “Bruce Willis” se ha transformado completamente. Incluso, la cicatriz en su ojo ha desaparecido y esa mirada triste se fue, para mostrarnos un bello felino que ha sido muy feliz después de haber padecido tantas penurias en su vida callejera. Esto nos deja como ejemplo que debemos cuidar a los animales y no abandonarlos a su suerte; y por supuesto, que el amor es capaz de generar cambios que de otra manera serían imposibles. Aquí tienes al nuevo azote de las gatitas.