Se dice que todos tenemos una “hora señalada” en la que moriremos y no hay nada que podamos hacer para evitarlo, aunque cuando sucede una tragedia, eso no sirve mucho de consuelo para quienes sufren la pérdida de un ser querido, como le sucedió al famoso actor Ashton Kutcher cuando su novia fue víctima de un homicida que acabó con su vida.
En el 2001, Ashton empezaba a salir con Ashley Ellerin, una estudiante de moda de 22 años, quien tuvo la mala fortuna de ser vecina de Michael Gargiulo, posteriormente conocido como “El Destripador de Hollywood”, y peor aún, que este desequilibrado la eligiera como una de sus víctimas, a quien le quitó la vida a puñaladas.
El 22 de febrero de 2001 se encontró el cadáver de Ashley en el interior de su casa, con 47 puñaladas en diversas partes del cuerpo. Después se sabría que Michael Gargiulo fue el responsable del crimen la noche anterior, como lo declaró cuando fue detenido en 2019 y luego de haber asesinado a otra mujer en 2015.
Ashton y Ashley se conocieron unos meses antes por un amigo en común. Justo el día del asesinato habían quedado de verse, pues el actor la había invitado a la fiesta de los premios Grammy, ya que en ese momento participaba en la exitosa serie That 70’s Show. La intención del actor era seguir saliendo y tal vez iniciar una relación romántica.
Ashton fue llamado a declarar, ya que Ashley habló por teléfono con él a las 8:30 p.m. y unos instantes después ocurrió el asesinato. El actor dijo que después de esa llamada tuvo un retraso de dos horas para pasar por ella a su casa. La llamó a las 10:15 p.m., pero ya no respondió. Intentó otras cuatro veces y nada. Pensó que se trataba de alguna falla en la red telefónica y siguió hasta la casa de la chica.
El actor dijo que no le mandaba mensajes después de cada llamada no respondida “porque no quería parecer ansioso”. Llegó a la puerta de Ashley a las 10:45 p.m., pero nadie abrió. Ashton pensó que se había molestado por el retraso y por eso ya no le había contestado, así que se fue a la fiesta. Al día siguiente, el cuerpo fue encontrado por la chica que vivía con ella y que llegó hasta en la mañana a la casa.
En su testimonio, el actor comentó que antes de irse de la casa se asomó por una ventana, esperando ver a Ashley, pero lo que vio fueron unas manchas en el piso. Sin embargo, pensó que se trataba de vino tinto que se le había caído a la chica. De acuerdo a las autoridades que llevaron el caso, al parecer, la chica acababa de salir de tomar un baño, seguramente para prepararse para la cita, cuando el asesino entró.
Según lo dicho por el actor, los investigadores determinaron que el asesino actuó muy rápido para cometer el crimen. A la mañana siguiente, al entrarse del homicidio, Ashton fue a la policía porque sus huellas estarían en la puerta de la casa y pensó que tal vez lo podrían incriminar. “Me estaba volviendo loco”, dijo en ese momento.
El testimonio del actor no fue cuestionado y nunca se le consideró como sospechoso. Además, se le vio muy afectado por lo sucedido, así que las investigaciones siguieron hasta que dieron con el asesino, de quien se dijo planeaba cuidadosamente sus ataques y elegía a mujeres jóvenes que vivían cerca de su casa, por lo que al inicio fue llamado “el vecino asesino” y después se convirtió en “El Destripador de Hollywood”.
Luego de ser detenido, se acusó a este hombre del asesinato de cuatro mujeres, en 1993, 2001, 2005 y en 2008 intentó matar a Michelle Murphy, quien logró escapar y se convirtió en testigo clave. Aunque se declaró inocente e incluso acusó a sus abogados de no hacer su trabajo, el juez de la Corte Superior de Los Ángeles, Larry P. Fidler, lo sentenció a muerte.
El asesino fue condenado en agosto de 2019, pero debido a una moratoria de las ejecuciones en California, todavía no se ha cumplido la sentencia, lo que le daría tiempo para buscar librarse de la muerte. Sin embargo, las pruebas encontradas hacen prácticamente imposible que lo logre.