Las canchas estadounidenses se encienden con el furor de la afición del fútbol al albergar al SheBelieves Cup, un torneo de selecciones al que se accede por invitación. En el estadio Dignity Health Sports Park, de Carson, California, se vivió una tremenda goliza de la selección femenil de Nueva Zelanda en su encuentro con Estados Unidos. Lastimosamente, la mayoría de las marcas fueron por autogol.
Sin duda alguna, la protagonista de este partido fue Meikayla Moore, la defensa del equipo oceánico, quien hizo gala de sus dotes de goleadora con tres anotaciones, solo que todas fueron en su propia portería. La joven de 25 años terminó fuera de la cancha después de su tercer autogol y sustituida por otra jugadora. Sin embargo, el equipo neozelandés terminó aplastado en un marcador de 5 a 0.
Hay días en los que te levantas con el pie equivocado y luego están los que llevan la suerte de Moore, quien a los cuatro minutos del primer tiempo ya daba indicios de lo que sería el resto de su juego. Tras un centro por la banda izquierda estadounidense, la futbolista interceptó el esférico para defender la meta. Sin embargo, el contacto con el balón terminó desviándose hacia la red de su propio equipo.
El partido que ya iniciaba mal solo se iba a poner peor. No fue mucho más de un minuto cuando el segundo gol del partido se registró. En esta ocasión, un centro desde la banda derecha logró penetrar en el área de Nueva Zelanda. El pase fue conectado con un cabezazo de la estadounidense Catrina Macario, pero el balón terminó atraído por la carita toda preciosa de Moore, quien la colocó, una vez más, en su portería.
Primer autogol
.@sophsssmith making things happen early for the opener!!! 🇺🇸#SheBelievesCup x @Visa pic.twitter.com/CpAvjdhqU1
— U.S. Women's National Soccer Team (@USWNT) February 20, 2022
Si ya tienes una cara atónita, imagínate la reacción de sus compañeras de equipo, quienes no creían que no llevaban ni 10 minutos de juego cuando ya eran aplastadas por ellas mismas. Pero apenas vamos en los primeros minutos y el juego debe continuar. Podría ser que en una vuelta de tuerca, el equipo anote otros dos goles en la portería correcta para igualar el marcador.
Al minuto 36, cuando la estadounidense Margaret Purce se metió con una carrera por el sector derecho, superó la defensa rival y en poco segundos ya estaba en el área neozelandesa lista para hacer un tiro, pero este fue detenido por la pierna zurda de Moore, quien sin querer queriendo, dirigió por tercera vez el balón a la meta de su equipo, provocando una fúrica cara en la portera, quien no creía lo que estaba pasando.
Segundo autogol
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La dirección técnica de la selección de Nueva Zelanda tenía que tomar las mejores decisiones para desmaquillarse la cara de payaso que les había quedado, por lo que antes de que terminara el primer tiempo, Moore fue a anotar, pero su nombre en la lista de jugadoras que se quedarían en la banca. El espacio en la cancha lo tomó Rebekah Stott, pero el mal ya estaba hecho y ni con patadas de ahogado lograría volver a la superficie.
Ya entrados en la segunda mitad del partido, Estados Unidos dijo “Y si jugamos un rato, no más por no dejar” y con los ojos bien puestos en la portería de Nueva Zelanda, Ashley Hatch marcó el 4-0 al minuto 51. Además, ya entrados en tiempo agregado, por si las moscas, Mallory Pugh terminó cortando las esperanzas de las neozelandesas al poner el último clavo en el ataúd cerrando con el quinto gol del encuentro amistoso.
Tercer autogol
name's Purce, because @100Purcent is always in her bag 👜 pic.twitter.com/GAss2w9txG
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Moore pudo perder el juego, pero no la ganas de seguir jugando y aún tiene una oportunidad para limpiar los sucios tacos llenos de decepción. El miércoles, Nueva Zelanda tendrá un juego con la selección femenil de República Checa, esperemos que la emoción siga a flor de piel.
