El gobernador de California, Jerry Brown, afirmó que está del lado de las personas indocumentadas y en contra de las acciones del presidente Donald Trump, en un informe de gobierno que se dio estos días. El gobernador resaltó, además, que el trabajo de los inmigrantes ha convertido al estado de California en la sexta potencia mundial.
Siendo tajante, y contundente, Brown enfatizó, ante legisladores y funcionadios estatales lo siguiente:
“Permítanme ser claro: defenderemos a todos, a cada hombre, mujer y niño, quienes han venido aquí para tener una vida mejor y han contribuido al bienestar de nuestro estado”.
Este discurso delineó la estrategia de California en oposición a las políticas migratorias, sanitarias y ambientales que ha planteado la nueva administración federal. Desde el gobernador Jerry Brown, hasta la mayoría de los legisladores y el flamante procurador estatal recién llegado de Washington, Xavier Becerra, expresaron su intención de plantarle cara al nuevo Presidente.
El mensaje de Brown, que se emite cuatro días después de la juramentación de Trump y luego de las marchas en las que participaron millones de personas, subrayó que no esperarán de brazos cruzados a que el nuevo presidente les dicte una agenda política con la amenaza de reducir el flujo de recursos.
California is Not Turning Back, Not Now, Not Ever: https://t.co/RhICxUtXYs #CASOTS pic.twitter.com/F7sgOas5YK
— Jerry Brown (@JerryBrownGov) January 24, 2017
Además, añadió que “California no da un paso atrás, ni ahora ni nunca”, aludiendo a que el estado no retrocederá ante cambios de dirección dictados por Washington.
“Mientras nos enfrentamos a retos diferentes, no se equivoquen: el futuro es incierto y los peligros abundan. Ya sea la amenaza contra nuestro presupuesto, o contra los californianos indocumentados, o contra nuestro esfuerzo de combatir el cambio climático, o incluso amenazas más globales, como un colapso financiero o un incidente nuclear o un ataque terrorista, este es un momento que pide valentía y perseverancia”, expresó el gobernador.
Brown reconoció las evidentes divisiones en todo Estados Unidos y dijo que, aunque nadie sabe lo que los nuevos líderes realmente harán, hay señales inquietantes. “hemos visto la audaz afirmación de ‘hechos alternativos'” y, aunque aún no sabemos que signifique, ya hemos escuchado los ataques que se han hecho hacia el ámbito científico.
El gobernador arrancó recordando que “muchos californianos han venido de México y de otros países y han hecho del estado un vibrante faro de esperanza”.
“No tenemos una estatua de la libertad con su inscripción sobre recibir a las masas cansadas…pero tenemos una puerta dorada, el Golden Gate , un espíritu aventurero y un corazón abierto”, dijo Brown.
Añadió que California defenderá a todos, incluyendo al 27% de su población, casi 11 millones de personas que nacieron, en lo que el llamó, “una tierra extranjera”.
Bajo el mandato de Brown, que inició en 2011, distintas leyes se han promulgado a favor de los indocumentados, como la AB60, que les otorga licencias de manejo desde 2015 (luego de 20 años de que el estado les negó ese documento); el Trust Act, que prohíbe a las agencias del orden compartir información de los migrantes detenidos por delitos menores con las autoridades migratorias; y otras que se oponen a la discriminación en la educación.
Por eso Trump identifica a California como un estado ‘santuario’ y amenazó con reducir la suma que cada año les envía el gobierno federal. Sólo para el sector sanitario, el Estado Dorado recibe 15,000 millones de dólares, con los cuales subsidia su programa de salud llamado Medi-Cal.
A continuación te dejamos un video con parte del discurso que el gobernador Brown dio esta mañana:
“Los inmigrantes son parte integral de quiénes somos y han ayudado a crear nuestra prosperidad desde el principio”.
“En tiendo que la ley federal se superpone a las estatales y que Washington se encarga de política migratoria, pero como estado hemos aprobado medidas protectoras como el Trust Act, las licencias, derechos laborales y acceso a educación superior para indocumentados, y si tenemos que defender esas leyes lo haremos”.
El estado funciona muy bien, y es de los estados que más ayuda ha recibido de programas como el Obamacare, donde 5 millones de personas han recibido seguro de salud y, reconoce, la anulación de esa ayuda sería muy nociva para California.
Antes del discurso de Brown, también hablaron en forma similar el vice gobernador Gavin Newsom –candidato a gobernador en 2018- y los líderes de ambas cámaras, Anthony Rendón (asamblea) y Kevin de León (senado). Pocos minutos antes, Brown había juramentado al nuevo procurador Xavier Becerra.
No todos en la minoría republicana de la legislatura aplaudieron su discurso. Algunos, como el asambleista republicano Tom Lackey, del distrito 36, dijeron que el discurso de Brown no tocó los temas cruciales del estado, y dijo:
“No siento confianza que seguiremos adelante con temas relevantes para la mayoría de Californianos, como el alto costo de la vivienda, la protección de trabajos para la clase media o las tasas de delincuencia en alza, que ni siquiera mencionó”.
A unos cuantos días de haber tomado la presidencia de los Estados Unidos, el presidente Trump ya ha tomado medidas drásticas que hacen temer a un sector de la población, se espera que los gobiernos que apoyan a los inmigrantes den la cara y ayuden a cambiar las drásticas decisiones del presidente.