La Agencia Antidrogas en Indonesia ha hecho una propuesta: recluir a los narcotraficantes en una prisión, la cual estará custodiada por cocodrilos; ya que estos no podrían ser burlados por los reos y así no podrían escapar.
Esta propuesta surgió gracias al cine, en específico, a la película Vive y deja morir, del Agente 007, donde se muestra una idea similar.
La idea de Budi Waseso, el director de esta agencia, es recorrer el archipiélago de Indonesia para juntar una buena cantidad de reptiles, y posteriormente llevarlos a la prisión, como guardianes.
“Pondremos la mayor cantidad posible de cocodrilos. Buscaré al tipo más feroz de este reptil. No puedes burlar a los cocodrilos. No los puedes convencer para que te dejen escapar”.
Aunque puede parecer una locura, tal vez no sea tan mala idea e incluso se pudiera replicar en otras cárceles alrededor del mundo, ya que nadie duda de la capacidad de un cocodrilo como guardián de su territorio.
Imaginemos que un preso se acercara al agua, para intentar escapar, sucedería algo como esto:
Actualmente Indonesia tiene algunas de las leyes más duras en cuestión de combate al narcotráfico, incluyendo pena de muerte para traficantes; esto, con un pelotón de fusilamiento, lo que los ha puesto en la mira internacional, ya que incluso los traficantes extranjeros son susceptibles de sufrir esta condena a muerte.
El presidente Joko Widodo ha insistido en que los traficantes de drogas deben morir, ya que el país está luchando en una “emergencia nacional”, debido al incremento en el consumo y distribución de drogas.
Esta propuesta todavía se encuentra como un proyecto, pues no se cuenta con el lugar donde se pudiera instalar y tampoco una fecha en la que se pusiera en operación. Esta medida se ha pensado debido a los altos índices de corrupción en las cárceles indonesias y en los cuerpos policiacos, ya que es frecuente que oficiales sean detenidos por sus nexos con los traficantes.
La Agencia Antidrogas ha manifestado que solo los narcotraficantes estarían en esta “prisión especial”, para impedirles que se sigan contactando con más gente y los recluten para sus bandas de tráfico de drogas.
Actualmente la agencia está en pláticas con el Ministerio de Justicia para llevar a cabo este plan, esperando que alguno de los reos no sea tan intrépido y habilidoso como James Bond y logre escapar, o peor aún, que logren domesticar a estos animales y luego los vuelvan contra quienes los pusieron ahí.