Para muchos, los “días libres” o las noches en casa no existen realmente, porque es común que el jefe les esté llamando fuera del horario laboral. Esto en determinado momento puede ser desgastante, ya que es como si nunca se despegaran del trabajo y a la larga puede ocasionar un enorme estrés. Sucede que los jefes ven esto como “normal”, pero al menos en Portugal, las cosas están cambiando.
En ese país emitieron una nueva ley que prohíbe a los jefes llamar, mandar mensajes o correos electrónicos fuera del horario laboral, ya que ahora es considerado como ilegal. Quienes insistan en este comportamiento se pueden hacer acreedores a una multa. Con esto, miles de trabajadores podrán descansar.
Esta ley destaca que el empleador debe respetar los tiempos libres de sus trabajadores, porque al estar llamándolo de forma reiterada fuera de su horario de trabajo, se constituye una violación a su privacidad e interrumpe sus tiempos de descanso y los que están dedicados a actividades en familia y personales, por lo que no se le debe molestar.
Además, en esta ley se regula el trabajo desde casa y los trabajadores pueden negarse a realizarlo, o bien, solicitarlo si las condiciones de la empresa se adaptan para que lo pueda realizar sin problema. Aquí se incluye que el empleador les garantice las herramientas para poder conectarse, así como cubrir los gastos extra que se generen por consumo de electricidad, gas o cualquier otro insumo necesario para realizar el trabajo.
Lisboa, capital de Portugal, está atrayendo una gran cantidad de trabajadores remotos, que es hacia donde se dirigen varias áreas y que con la pandemia se aceleró el proceso, pasando de un 17 por ciento en el 2019, a un 32 por ciento de la fuerza laboral mundial en el 2021. Sin duda, los portugueses respirarán aliviados al no tener que estar respondiendo las llamadas de sus jefes. Una buena medida.