La habilidad de abrir una cerveza con cualquier objeto es un atributo de bebedores de verdad. Ya sea con un billete o con una moneda, esta siempre será aplaudida, pero definitivamente no será admirado quien desaproveche el sagrado líquido y dañe a otro ser para querer lucirse en redes.
En Estados Unidos, tres pescadores acaban de hacer gala de su ignorancia en cuestiones de cerveza y, sobre todo, en cuestiones ambientales al utilizar a un tiburón varado en la playa para abrir una burda lata de cerveza. Además, grabaron todo y, aunque han tratado de aminorar sus actos, la gente en redes se encuentra sumamente indignada y pide una sanción para estos hombres.
Todo sucedió en las aguas de Florida, donde estos tres vivos quisieron impresionar al público en redes arrastrando a un tiburón varado fuera del agua. En el video puede apreciarse cómo uno de ellos le sujeta por la punta de su mandíbula y cómo otro le arroja la lata a los dientes, que queda levemente prendida y que sin duda causa dolor en el escualo, quien pronto se sacude para deshacerse de ella.
Entonces el hombre recoge la lata que chorrea cerveza y en un alarde de estupidez bebe del agujero que el tiburón hizo con su diente. Los responsables de esta barbaridad llevan por nombre Wyatt Dallison y Cody Scott, por lo que deseamos que les recuerden mucho a sus santas madres cada vez que los vean.
Los pescadores alegaron que no le hicieron daño al tiburón y que desconocían que moverlo fuera ilegal. Aun así, tienen todo el desprecio de la gente en redes y la advertencia de la Oficina Nacional de Pesca Marítima de Estados Unidos. Wyatt dijo que “fue un poco divertido” y que no estaban buscando lastimar a nadie. Además, jura que de ahora en adelante no volverá a tocar a ningún tiburón.
El video fue publicado en TikTok, pero al ver la reacción negativa de la audiencia, fue prontamente retirado. Sin embargo, quedó registro de él en YouTube. Esperamos no tener que volver a dar una noticia como esta y también confiamos en que todos asumamos el papel de inteligentes bebedores que sabemos que la mayoría de los hombres somos.