Bien dicen que el problema no estuvo cuando unos niños ingirieron las papitas más picantes del mundo, sino cuando las tuvieron que sacar de su sistema. Los menores oriundos de California se unieron a un popular reto conocido como One Chip Challenge o “Nomás una papirringa”, en español, el cual consiste en comer una papa sin ayuda de atenuantes como agua u otros alimentos.
Esta fritura es conocida por ser la papita más picosa del mundo, pues sus ingredientes principales son el chile Scorpion (asumo que no sabían que el Scorpion es proveniente de Trinidad y Tobago) y el chile Carolina Reaper. La marca del producto es conocida como Paqui y su empaque ya advierte de las consecuencias que puede tener su ingesta, ya que su caja tiene forma de ataúd.
Los nueve niños que se enchilaron como nunca en sus vidas eran estudiantes de la escuela Lodi High School, quienes en el transcurso de una semana tuvieron que ser hospitalizados, pues empezaron a experimentar falta de aire y vómito incontrolable.
El reto se ha vuelto viral y es alentado por la propia marca, que comparte desde su sitio oficial las mejores videoreacciones al sabor picante de sus papitas. Además, califican el nivel de capo según el tiempo que aguantan sin tomar agua. Por ello era de esperarse que este reto llegara a niños y les causara estragos mayores.
Para que se den una idea, el chile jalapeño tiene cinco mil puntos en la escala de picor, mientras que el chile Scorpion y Reaper por sí mismos tienen dos millones de unidades de Scoville, es decir, son 400 veces más picantes. Por ello los médicos han instado a los padres a vigilar a sus hijos, pues la consecuencias podrían ser graves en algunos casos.
Es posible que sienta ardor o dolor en todo el tracto digestivo y puede ser bastante intenso después de un breve periodo de tiempo, al igual que una reacción como la que podría tener un asmático con espasmos bronquiales y si tienen vómitos persistentes, podrían necesitar hidratación intravenosa o medicamentos para detener las náuseas.
Sin duda, estos niños no volverán a rascarle los tanates al diablo (porque eso es lo que parecen los chiles) luego de haber ido a parar al hospital con el tracto digestivo en llamas. También esperamos que este challenge no evolucione al modo tampón, pues ya ven que luego todo lo quieren probar por el hemisferio sur del cuerpo.