Muchas personas han descubierto a algún familiar captado por el satélite de Google Maps y en algunas ocasiones resulta gracioso, pero en otras, triste, pues ahí quedan imágenes de seres queridos que ya no están con nosotros. Sin embargo, esta foto satelital es triste y macabra, ya que ayudó a resolver el misterio de un joven desaparecido.
El 7 de noviembre de 1997, William Moldt, de 40 años, fue reportado como perdido después de haber salido por la noche en Lantana, Florida. De acuerdo a los reportes, Moldt se encontraba en un club nocturno, que dejó para recoger a su novia y con la que tuvo su última comunicación a las 9:30 p.m. para decirle que ya iba en camino. Pero jamás llegó a la cita.
Su desaparición fue investigada por la policía, pero nunca encontraron ningún rastro o pista sobre él, por lo que pensaron que había sido asesinado. Pero más de 20 años después, alguien avisó a la policía que había encontrado un automóvil sumergido en un estanque a través de Google Maps y revivió el caso de Moldt. De acuerdo con la BBC:
La oficina del sheriff del condado de Palm Beach (PBSO, en inglés) informó este jueves que un exresidente de Grand Isles estaba haciendo una búsqueda en Google Earth, en esa área, cuando notó lo que parecía ser un vehículo en un lago.
En 2019, el cuerpo de William Moldt fue encontrado en el interior del auto y se confirmó su muerte, pero no por los motivos iniciales. Las autoridades dijeron que posiblemente William llevaba mucho tiempo sumergido debido a las condiciones del auto.
Ahora los investigadores del caso piensan que Moldt perdió el control de su carro y cayó en el sitio, que en 1997 apenas estaba en construcción, motivo por el que nadie se percataría del accidente. Pero nada es seguro, solo se sabe que desapareció de la faz de la Tierra y reapareció del mismo modo.
La imagen satelital estuvo disponible durante más de diez años, presumiblemente desde el 2007, pero fue hasta hace poco que alguien notó la presencia del automóvil en Google Maps. La identidad de Moldt fue confirmada por los forenses una semana después del hallazgo del coche y, sin muchas respuestas de por medio, se resolvió su paradero.