El gobierno estadounidense está obligando a los remedios homeopáticos a llevar una advertencia en la etiqueta que asevere que no hay evidencia científica que los respalde.
Según la Comisión Federal de Comercio, una afirmación de medicamentos homeopáticos que no se encuentra sometida a pruebas científicas confiables ni justificada en métodos competentes necesitará en la etiqueta especificaciones que comuniquen que no existe la suficiente evidencia científica para demostrar la eficacia del producto.
Así mismo, es necesario también informar que los remedios están basados en teorías de la homeopatía que datan de 1700, y que aún no se encuentran avalados por la medicina moderna.
A pesar de tener muchos adeptos que realmente creen en su efectividad, el experto en políticas de salud, Timothy Caulfield, explica que “creer que la homeopatía funciona, es creer en la magia”.
Sin embargo, reportes indican que será poco probable que logren desaparecer este tipo de productos de las farmacias. Así que todo parece indicar que iniciará una disputa médica.
“La FTC obligará a que los remedios homeopáticos cumplan los mismos requisitos que cualquier droga en cuanto a advertencias de eficacia y seguridad en su etiqueta”, se afirma en el comunicado del organismo.
La medicina alternativa de la homeopatía nació en 1814, y fue una idea concebida por el médico alemán Samuel Hahnemann. La práctica se regía por dos principios fundamentales: en principio, si el paciente tenía fiebre, Hahnemann lo trataba con una droga que indujera fiebre; si el problema eran las alergias, las aumentaba.
El otro pilar era la dilución. Hahnemann había afirmado que si se ponía una gota de medicina entre 100 millones de gotas de otro líquido, y el remedio se sacudía con vigor mientras se diluía, éste conservaba su poder, lo que él llamó “fuerza espiritual desmaterializada”.