Para muchos es indispensable que en su oficina de trabajo haya un ambiente divertido. Sin embargo, en el mundo hay de todo y hay otros a los que esto no les agrada y prefieren no participar en la dinámica en su centro laboral, aunque esto puede generar desencuentros con sus compañeros y la propia empresa.
Resulta que un hombre al que se le identifica como Mister T se le despidió de su trabajo porque “no era lo suficientemente divertido”, algo que la empresa en la que trabajaba interpretó como falta de compromiso e integración con su equipo. Él los demandó y después de una larga batalla en los tribunales, se ganó “el derecho a no ser divertido”.
En Francia, los compañeros de la consultora Cubik Partners acostumbran ir a beber unos tragos luego de la oficina, pero Mister T se negaba a asistir. Durante tres años que estuvo trabando ahí, no quiso acompañar a los miembros de su equipo y en 2015 fue despedido por “incompetencia profesional” porque uno de los valores que rigen a la empresa es la diversión…
Después de años, por fin, un tribunal le dio la razón a Mister T, ya que consideraron que ese “valor de la diversión” consistía en beber alcohol en exceso luego de terminar de trabajar. Además, se promovían otras conductas como la promiscuidad, la intimidación y, en general, se incitaba a los empleados a participar de diversos tipos de excesos.
El tribunal también consideró que el trabajador estaba en todo su derecho a negarse a participar en estas actividades fuera del horario de trabajo y haberlo despedido fue vulnerar su derecho de libre expresión. Además, por supuesto, esto no se puede considerar como un motivo válido para ser despedido.
El juez afirmó que Mister T tiene todo el derecho a no ir a beber con sus compañeros y obligó a la consultora a pagarle 3500 dólares por haberlo despedido, esto de inicio, porque la investigación continuará para determinar los daños que este despido le ocasionó durante los años que pasaron desde que ya no fue requerido en la empresa.
Hemos escuchado muchas veces de trabajadores que son despedidos por llegar con unas copas de más al trabajo o porque se ponen de mala copa en la posada de la empresa y ofenden a los demás, pero que alguien sea despedido por negarse a beber, eso sí que resulta increíble. ¿Qué opinas?