Hay personas que simplemente no pueden renunciar a su mascota, como esta familia de Norfolk, Inglaterra, quienes recientemente pagó 250 dólares por extirparle un tumor a su pez dorado de 20 años de edad.
Después de notar una rara protuberancia en la aleta de Bob, su pez, la familia lo llevó inmediatamente con su veterinario local, Faye Bethell, quien llevó a cabo la cirugía en menos de 30 minutos.
“La opción era remover el quiste, o ponerlo a dormir, pero ahora está muy bien. Los dueños de Bob estaban encantados y agradecidos por salvar a su pez dorado, quien es más grande que sus hijos, y es considerado como parte de la familia”.
Después de darle al pecesito antibióticos, la doctora utilizó un monitor de pulsaciones cardiácas en miniatura, y un equipo de microcirugía, que ayudaron a que todo saliera bien.
“Es muy complicado, porque todo es pequeño”, continuó explicando la doctora Bethell.
Ahora Bob se encuentra de vuelta en su tanque, feliz con su familia.
“Ahora las mascotas viven por más tiempo, pues sus dueños se preocupan por ellos y su salud”. Finalizó la doctora Bethell.