Ezra Miller, intérprete que dio vida a Flash en las producciones del Universo Extendido DC (DCEU, por sus siglas en inglés), fue una de las figuras más controversiales y vituperadas durante el 2022 debido a sus conductas fueron caóticas y altamente censurables, entre explosiones sociales violentas, agresión verbal y física, sospechas de secuestro y corrupción de menores. Sin duda, 2022 fue un año duro para la celebridad de 30 años, quien se identifica como persona no binaria.
En agosto de 2022, Miller aseguró que deseaba corregir el rumbo y obtener ayuda profesional para ello y parece que una de sus últimas tropelías podría tener un desenlace afortunado, pues las autoridades le otorgaron solamente un año de libertad condicional en lugar de los posibles 26 años de cárcel que enfrentaba por los cargos que se le achacaron en octubre del año pasado tras robar alcohol del hogar de un vecino de ellos en Stamford, Vermont. Según la jueza, el año de condicional, 692 dólares de multa y las 41 condiciones a las que se someterá son el balance perfecto entre reformación y castigo.
Culpables de uno de tres, pa’ darles chance
En una sesión presencial matutina el 13 de enero de este año, Miller y su abogada Lisa Shelkrot se presentaron ante la jueza Kerry Ann McDonald-Cady, con la intención de no ir a juicio y, en vez de ello, declararse culpable del delito menor de allanamiento de morada, admitiendo que se introdujo en la propiedad de la víctima el 1 de mayo de 2022 sin permiso del dueño de la casa.
De ese modo, los cargos de pequeño hurto (con pena máxima de un año de cárcel y mil dólares de multa) junto al muchísimo más grave cargo de robo con allanamiento de morada, que podría haberse castigado con hasta 25 años de cárcel, fueron desestimados y retirados de la mesa sin prejuicio, es decir, con tan solo un año de libertad condicional que no sea rota, podría considerarse que este problemón fuera un caso cerrado. La idea detrás de la pequeñísima condena es que “Miller tengan oportunidad de corregir el rumbo” pero que sí reciba un castigo.
No pocas condiciones, pero mejores que la alternativa
Originalmente, cuando Miller fue acusado en octubre del año pasado de pasarse de lanza e irrumpir en la casa de un vecino para robarle alcohol, la celebridad de 30 años se declaró inocente de los cargos de pequeño hurto y robo con allanamiento de morada. Sin embargo, aparentemente, tras hablar con su abogada, decidió no jugársela y se declaró culpable de allanamiento ilegal para así solo tener que cumplir con un año de libertad provisional y una multa total de 692 dólares.
Según se reporta, el año que Miller tendrá que cumplir en libertad condicional incluye 41 condiciones que debe cumplir a cabalidad, entre las que destacan mantenerse lejos y no tener en ningún momento contacto con la víctima de su allanamiento, no ingerir bebidas alcohólicas, someterse a pruebas aleatorias de drogas y esmerarse en continuar con su tratamiento mental.
Anuencia de la ley y de la víctima: todo parece en orden
La jueza le preguntó a Miller si alguien le había prometido algo, forzado o amenazado para que aceptara el acuerdo de la libertad condicional, pero su respuesta fue negativa. Además, la celebridad dijo que estaba en sus cabales al momento de tomar la decisión (cero intoxicación en su sistema). Ante esto, la jueza consideró que el trato estaba muy bien y que demostraba un buen balance entre rehabilitación y castigo. La víctima de la última tropelía de Miller también se mostró de acuerdo con la pena que le permitiría a la estrella “mejorarse”.
Aparentemente, Miller no bromeaba cuando declaró en agosto pasado, luego de sus numerosos escándalos, que había tocado fondo y que buscaría tratamiento para combatir los complejos problemas de salud mental que sufría, aclarando que había atravesado una época de crisis intensa pero que ya se había dado cuenta de los problemas que tenía, por lo que empezó un tratamiento para subsanarlos. Además, la celebridad agregó que quería disculparse con las personas a las que alarmó y molestó con su comportamiento. The Flash, protagonizada por Miller, todavía está programada para estrenarse el 16 de junio de 2023.