A reserva de que aparezca alguno más, Eris, un perro de la raza borzoi, ya es considerado como el can con el hocico más largo del mundo, ya que alcanza 30 centímetros, lo que le da una apariencia caricaturesca que le está dando la vuelta al mundo, demostrando una vez más que los animales ocupan las primeras posiciones cuando se trata de popularidad en internet.
Lily y Savannah adoptaron a Eris en diciembre de 2018 y desde entonces se han dedicado a darle todo el cariño y cuidados que necesita, además de que les encanta tomarle fotografías, incluso desde antes de que se volviera famoso por su enorme hocico. Ahora es conocido en buena parte del mundo.
Además de su aspecto curioso, se ha ganado el corazón de estas dos chicas y de los vecinos gracias a su carácter amable y juguetón. Justamente fue entre el vecindario donde primero empezó a crecer su popularidad, y después de que sus fotos empezaron a circular en redes sociales su fama se hizo global.
Al principio varios veterinarios advirtieron que tal vez Eris tendría problemas en los dientes, aunque al paso del tiempo sólo tiene algunas dificultades a la hora de comer debido al tamaño enorme de su hocico, y fuera de eso no tiene ninguna complicación; al contrario, ya que puede alcanzar más cosas e incluso introducir la nariz para olfatear en lugares a donde otros perros no llegan.
De acuerdo con especialistas de la Asociación Americana de Psicología, luego de realizar investigaciones con perros, destacan que no existe evidencia de que un can con un cráneo mayor tenga mejor olfato, así que en este caso no se trata de que tenga un poder especial, sino simplemente su hocico es más largo que el común.
Sin duda tiene una apariencia extraña, pero tal parece que al igual que a sus compañeras humanas eso no le molesta, sino que le agrada y se divierte al máximo jugando y alcanzando cosas, mientras le toman fotografías para mostrar ese rasgo distintivo que lo hace diferente y especial en el mundo de los perros.