Netflix es una compañía que se vanagloria de su cultura de trabajo “increíble y única”. En su narrativa oficial, ofrecen libertad a individuos altamente responsables, quienes son guiados por sus principios morales para tomar decisiones correctas que beneficien a la compañía, los empleados, inversionistas y suscriptores. A todo el mundo, vamos.
Sin embargo, debido al irreconciliable descontento de trabajadores de la compañía, que no aprueban moralmente ciertos contenidos controversiales, como The Closer (2021), de Dave Chappelle, Netflix dice fuerte y claro que así son las cosas y si no quieren trabajar en ello, probablemente no pertenecen ahí. Con el lanzamiento del políticamente incorrecto especial SuperNature (2022) de Ricky Gervais, muchos empleados podrían tomarle la palabra a la plataforma e irse en busca de pastos más verdes… o chistes menos transfóbicos.
No se vayan… deteniendo
A pesar de que han querido mostrarse como una empresa buena onda y progresista, en un cambio reciente de la postura de Netflix frente a sus empleados, la compañía de streaming aclaró que si bien sus empleados son libres de expresar sus opiniones respecto al rumbo que sigue la plataforma, la empresa es libre de mandarlos por un tubo y archivar dichas opiniones en la sección “no nos importa”. Ah, eso sí, si no les gusta, son libres de irse.
Aparentemente, ese cambio ocurrió debido al fuerte impacto y desagrado que el especial de stand up The Closer, de David Chappelle, provocó entre los defensores de la dignidad LGBT+, en particular trans, que trabajaban en Netflix. Con el estreno de SuperNature, de Gervais, Netflix reafirma su postura de apoyar a sus “creadores” antes que a sus trabajadores. El especial de Chappelle se ubicó en su momento en el top 10 de shows vistos en Netflix y el de Gervais parece ir por el mismo camino…
SuperNature
El contenido controversial no se hace esperar y a los cinco minutos del especial de comedia de poco más de una hora ya dejó claro lo que está por venir: bromas que hacen objetivo, ridiculizan y a veces simplemente ningunean a la comunidad de la diversidad, en particular a su sector trans, a sus defensores, a sus detractores… y prácticamente a todo el mundo que alguna vez ha puesto el tema de la identidad LGBT+ sobre la mesa.
Pero es solo comedia, ¿no? A pesar de que existe desagrado por parte de la comunidad LGBT+, que se ha sentido francamente atacada, incluso fans de Gervais (que dicen no preocuparse por el controversial contenido) consideran que el show es repetitivo y burdo, por debajo del talento del comediante. Pero, por lo demás, ha tenido una gran difusión, al menos juzgando por la cantidad de gente que lo ha visto, ya sea que les haya gustado o no.
Descargo de responsabilidad de Gervais
Hacia el final del programa (gran parte del cual emplea para hacer “chistes” a costillas de la comunidad de la diversidad), Gervais aclara que solo lo hizo “para sorprender y escandalizar” porque “él es muy respetuoso de todo el mundo”… vamos, según él, es prácticamente la Madre Teresa de Calcuta con barba y bigote.
Les voy a ser completamente sincero: en la vida real, por supuesto que apoyo los derechos trans. Yo respaldo todos (y cada uno) de los derechos humanos y los derechos trans (no se vayan a sorprender) son derechos humanos. Vivan su vida al máximo. Usen sus pronombres predilectos. Sean del género que sientan que son.
Gervais y Netflix: ¿Doble moral o buenos publicistas?
Aunque Gervais pasa, en el mismo aliento, de burlarse de “las nuevas mujeres” (mujeres trans) a mandar al diablo a las detractoras de ese segmento de la sociedad (les llama despectivamente TERF, por el inglés para feminista radical transexcluyente), el comediante es usualmente considerado un firme defensor de los derechos LGBT+. ¿Está siendo hipócrita o simplemente sabe que no hay mala publicidad y busca escandalizar para llamar la atención a como dé lugar?
Netflix sigue una política de no permitir ‘contenido que incite al odio o a la violencia’, pero todos saben que el contenido antiLGBTQ hace eso exactamente (y es no solo permitido, sino fuertemente publicitado en su plataforma). A pesar de que Netflix aloja shows LGBTQ revolucionarios, el servicio se niega a seguir su propia política en el ámbito de la comedia.
– Declaración de la Alianza de Gays y Lesbianas contra la difamación, GLAAD
Ya lo veía venir
No intento ofender, pero mientras más gente se siente ofendida por un chiste (particularmente en Twitter), más divertido me parece. Mientras más enojados (me contestan), más posibilidades tengo de convertir esa respuesta en efectivo y en carcajadas. La cultura de lo políticamente correcto no está matando a la comedia. La está impulsando, como siempre lo ha hecho.
– Ricky Gervais, en un tuit de 2019
El comediante aseguró en una entrevista, respecto a SuperNature, que “no hay nada controversial” en su nuevo especial, “solo son chistes”. Pero aun así, predijo que encendería críticas. El cómico dijo en el show de Jim Norton y Sam Roberts que todo el mundo se quejaría de su especial. De hecho, Roberts compartió su teoría de que “Netflix había tomado medidas preventivas (el cambio en su política) porque sabían que el show de Gervais enfadaría al 100 por ciento de los trabajadores… de nuevo”.
Son libres… para marcharse
No a todos les gustará o no todos estarán de acuerdo con todo lo que ofrece nuestro servicio. Cada título es distinto y se apoya a la expresión artística (…) se fomenta la diversidad de audiencias y gustos (…). Esto quiere decir que nuestros empleados podrían tener que trabajar en contenidos que no aprueban. Si se les dificulta apoyar nuestra amplitud de contenido, Netflix podría no ser el mejor lugar para ustedes.
– Manifiesto de cultura laboral de Netflix, actualizado
En una clara llamada a los empleados a “reconsiderar si Netflix es el mejor lugar para que trabajen”, o sea, a renunciar si no les gusta cómo se hacen las cosas ahí, la nueva política de cultura laboral de la compañía parece ser resultado directo de un año y medio de discusiones con sus empleados sobre problemas culturales internos.
Contenidos problemáticos
Muchos atribuyen directamente el cambio de política a la campaña interna iniciada por empleados simpatizantes con la cultura de inclusión del movimiento de la diversidad (LGBT+) para aclarar las circunstancias que llevaron a la plataforma de contenido digital a producir y comercializar el especial Cuanto más cerca (2021), de Dave Chappelle, por la percepción de que contiene material despectivo hacia la comunidad transexual.
En su propia defensa, Chappelle hace alusión a su relación con la comediante transexual Daphne Dorman, quien, hasta su muerte por suicidio el 44 de octubre de 2019, defendió el trabajo del comediante contra las críticas de la comunidad LGBT+. Lo interesante aquí es que la familia de Dorman reafirma que Chappelle es amigo de la diversidad, aunque miembros del movimiento aseguran que solo usa a la comediante trans como excusa para salvarse el pellejo.
Inconformidad del personal
Trabajo en @netflix. Ayer lanzamos otro especial de Chappelle, en el que ataca a la comunidad trans y a la mismísima validez de nuestro transgénero, todo ello mientras trata de enconarnos con otros grupos marginalizados. Escucharán mucha charla acerca de ‘ofensa’. No estamos ofendidos.
– Terra Feld, trabajadora transgénero de Netflix
Además de levantar sus quejas (verbalmente y por escrito, como piden en la política laboral de Netflix), los trabajadores que están en contra del contenido ofensivo contra la comunidad trans llevaron su protesta a las calles y, cómo no, a las redes sociales. Toda esta presión desde afuera y adentro parece haber tensado los hilos de la dirección de Netflix, que se rehúsa a censurar contenidos e insta a los inconformes a revaluar su carrera en la compañía.