La tensión en la península coreana se ha incrementado considerablemente desde que el líder norcoreano Kim Jong-un dijo en su mensaje de año nuevo que el país estaba muy cerca de poder probar un misil intercontinental capaz de llevar una bomba nuclear a los Estados Unidos.
Corea del Norte dice que podría lanzar un misil balístico intercontinental “en cualquier momento”, incluso después de que al parecer han abierto la puerta a posibles diálogos con Donald Trump.
En un comunicado, un portavoz del canciller de Corea del Norte dijo: “Estados Unidos son los culpables del desarrollo del programa de misiles”.
En entrevista con la NBC, el secretario de Defensa, Ash Carter, dijo que era una “amenaza seria” y que Estados Unidos destruiría cualquier misil lanzado en su contra.
China y Corea del Sur tampoco se mostraron contentos y afirmaron que cualquier prueba de ese tipo llevaría a sanciones.
“Si Corea del Norte ignora nuestra advertencia y lanza un misil intercontinental, enfrentará poderosas sanciones y presión de la comunidad internacional”, dijo el ministro de defensa de Corea del Sur.
Pero hasta ahora las sanciones internacionales han fallado en prevenir el programa de desarrollo nuclear. El profesor asistente de estudios internacionales de la universidad de Yonsei, John Delury, opinó que el comunicado norcoreano fue “definitivamente un mensaje al equipo de transición de Trump, para que piensen mejor en su política exterior, evitando llegar a esos extremos y repensar las sanciones impuestas por el gobierno de Obama”.
Trump teuiteó al respecto:
“Corea del Norte dijo que está en las etapas finales de desarrollar un arma nuclear capaz de alcanzar a los Estados Unidos ¡Eso no pasará!”
El consejero de Trump, Kellyanne Conway, fue cuestionado sobre las ideas de Trump para parar las bombas nucleares.
“Él no ha dicho públicamente lo que hará, y no lo hará antes de empezar su mandato”, dijo.
Analistas han dicho que Trump, a través de sus propios pronunciamientos y la falla de la administración Obama para prevenir el desarrollo del arsenal de Corea del Norte, tiene pocas opciones. Corea del Norte ha conducido cuatro pruebas nucleares exitosas, fortaleciéndose ante cualquier futura negociación.
“Los norcoreanos están tratando de crear espacio con Trump para revertir la política de Obama y hablar con él de manera seria”.
Bruce Bennett, analista de defensa, dijo a CNN que a pesar del aparente progreso de Corea del Norte, no hay tecnología suficiente para llevar una bomba nuclear.