Uno de los grandes misterios desde la mitad del siglo pasado a la fecha, que ha alimentado historias, películas y sobre todo, el miedo de la gente, al parecer ha sido revelado gracias a la ciencia.
Nos referimos a la desaparición de embarcaciones y aviones en el llamado (y temido) Triángulo de las Bermudas, que dentro de la cultura popular se ha convertido en un centro de intensa actividad paranormal, aunque la mayoría de las investigaciones indican que el mal tiempo y los errores humanos han sido los culpables más probables de las desapariciones, e incluso, algunas investigaciones han destacado el hecho de que el número de desapariciones es similar al de muchos otros lugares en el mundo.
Mientras que su reputación puede asustar a algunas personas, el Triángulo de las Bermudas es en realidad parte de una ruta de navegación usada regularmente por cruceros y otras embarcaciones que navegan con frecuencia también por la zona.
Los aviones son también comunes en el Triángulo de las Bermudas, tanto aviones privados como comerciales.
Las historias de desapariciones inexplicables en el Triángulo de las Bermudas comenzaron a llegar cerca de 1950 y se ha informado de forma constante desde entonces, dándole diferentes explicaciones, desde Ovnis, el continente perdido de la Atlántida, anomalías magnéticas, piratas, hundimientos deliberados, huracanes, mal clima, olas enormes, errores humanos; en fin, de todo.
Durante años muchos han perdido la cabeza buscando una respuesta sobre las misteriosas desapariciones de barcos y aviones, pero parece que por fin se ha encontrado la solución. Al menos, eso es lo que los científicos creen, después de encontrar una serie de cráteres en las costas de Noruega. Sí, en Noruega.
A pesar de la distancia entre Noruega y Bermuda, los científicos encontraron profundos cráteres de 1.6 kilómetros de ancho y poco más de 45 metros de profundidad, en el Mar de Barents, los cuales se cree que fueron creados por una explosión de metano bajo el lecho marino. Se especula que esto es lo que ocurre también en el Triángulo de las Bermudas, en una región que no se ha definido, en la parte occidental del Océano Atlántico Norte, más o menos entre la Florida, las Bermudas y Puerto Rico.
Investigadores de la Universidad del Ártico de Noruega dijeron al Sunday Times:
“Existen múltiples cráteres gigantes en el fondo del mar, en una zona en el Mar de Barents, y son probablemente causadas por enormes explosiones de gas. El área del cráter representa uno de los mayores puntos para la liberación de metano marino en el Ártico”.
Los científicos añadieron que las explosiones que causan los cráteres podrían presentar riesgos para los buques que viajan en el mar de Barents. Ha sido una teoría que se ha manejado por un tiempo entre algunos expertos, sobre que esto es precisamente lo que ocurre en el Triángulo de las Bermudas, y esta nueva prueba en otro lugar bien podría fundamentar esas sospechas.
Los científicos están investigando si el estallido de estas burbujas es suficiente para hundir barcos y van a presentar sus resultados muy pronto. Tal vez estamos en la antesala de romper varios mitos, y nos daremos cuenta que simplemente se trataba de gas, y no de monstruos, extraterrestres o civilizaciones perdidas, lo que ocasionaba las desapariciones.