Buenas historias suceden durante la época navideña, y esta es una de ellas, pues un chofer de autobús escolar en Dallas, Texas, para la escuela primaria Lake Highlands, fue ahorrando dinero para poder darle un regalo a cada uno de los pequeños que transporta diariamente en su trabajo.
Curtis Jenkins se convirtió en todo un Santa Claus: le preguntó a cada uno de los 70 niños que suben al autobús cada día, qué es lo que querían de regalo para navidad, y luego pidió también el apoyo de la comunidad, como si fueran sus duendes ayudantes, y así logró reunir todo el dinero que necesitaba para comprar los obsequios.
Para el trineo no había problema: tenía el autobús.
La idea principal de Curtis, según él mismo declaró a ABC, era darles una muestra del cariño que les tiene a los niños, más allá del trabajo que cumple a diario. Jennifer Wilcox, presidenta de padres de familia de la escuela, manifestó:
Les preguntó a los niños qué querían para Navidad e hizo una lista. Creo que su motivación fue bendecir a los niños y poner sonrisas en sus caras.
La escuela también hizo un reconocimiento a través de su página en Facebook, a la noble acción de este hombre:
Este es Curtis Jenkins, el conductor de autobús de nuestra escuela. Le preguntó a cada niño qué querían para Navidad y luego lo compró para ellos. ¡Incluso había una bicicleta en ese autobús! Esto nos recuerda cuánto bien hay en el mundo y cómo deberíamos esforzarnos por ser un poco más como Curtis.
Así es, ojalá haya menos Grinch y más Curtis…