El gobierno de Tasmania ha encontrado la manera de reciclar plásticos y otros residuos para utilizarlos en la pavimentación, y acaban de hacer la primera prueba al revestir una de sus calles.
Ahora otros países podrían replicar esta inteligente hazaña y darle al mundo un nuevo respiro.
Todo sucedió en la calle Charlton, en la ciudad de Kingborough, Tasmania, en la que, para cubrir 500 metros de la vialidad, se utilizaron alrededor de 173,600 bolsas de plástico y empaques, 5,900 cartuchos de impresoras, 82,500 botellas de vidrio, y más de 33 toneladas de asfalto reciclado.
El Consejo de Kingborough, un organismo del gobierno local en Tasmania, construyó la carretera para reducir el impacto ambiental, por lo que se espera que este hecho motive a otros gobiernos del mundo a realizar acciones drásticas que ayuden a combatir la contaminación ambiental.
Richard Atkinson, uno de los integrantes del consejo, dijo a la cadena australiana ABC News:
Si calcula cuánto plástico de ‘un solo uso’ hay en estos 500 metros de carretera, es aproximadamente el equivalente a dos años de plástico recolectado en Kingborough. Si esto tiene éxito, continuaremos usándolo para el resto de nuestras carreteras.
Según las declaraciones hechas por Atkinson, se estima que la carretera durará un 15 por ciento más que una convencional. Aunque el producto resultó ser más caro, el consejero dijo que a la larga sería más barato para el gobierno.
El consejo se asoció con la compañía de construcción de carreteras Downer, las empresas de recuperación de recursos y reciclaje Close The Loop y el Grupo RED para construir la vía.
Stuart Billing, gerente general de pavimentos de Downer, dijo:
Junto con el Consejo de Kingborough y nuestros socios, hemos demostrado que con liderazgo y la tenacidad para hacer una diferencia positiva, hemos establecido un nuevo punto de referencia en el estado cuando se trata de sostenibilidad, mediante la creación de nuevas vías para reciclar y reutilizar los materiales de desecho en nuevos flujos de uso.
El concepto de asfalto de plástico no es nuevo. En un pueblo pesquero en el extremo suroeste de la India, una planta de reciclaje recolecta redes de pesca desechadas y las descompone en material que se usa para fortalecer el asfalto.