Muchas veces nos quejamos porque algo que pedimos se tarda demasiado en llegar, pero si lees esta historia te darás cuenta de que tu caso no es tan grave como el de miles de personas que están esperando un automóvil, porque el que pidieron viajaba en un barco que sufrió un accidente desde septiembre del 2019, y hasta la fecha no se ha podido rescatar la nave y a la valiosa carga que contiene en su interior.
El MV Golden Ray es una enorme embarcación coreana de carga, propiedad de Hyundai, pero tras sufrir un desperfecto se quedó “acostado” sobre el mar, en St. Simons, cerca del puerto de Brunswick, en las costas de Georgia, Estados Unidos.
Casi se cumple un año del accidente y aún no se han podido recuperar los más de 400 vehículos Hyundai y KIA que hay en su interior. De acuerdo con los peritos, un incendio ocasionó que la nave tomara esa curiosa posición, lo que por supuesto complica el trabajo de rescate, y sigue pasando el tiempo.
Los esfuerzos de rescate se vieron interrumpidos por una serie de tormentas, luego por la pandemia de Covid-19 y también porque esa zona es de huracanes. Por si fuera poco, varios de los miembros de la tripulación dieron positivo al nuevo coronavirus SARS-CoV-2, así que mejor se declaró la pérdida total de todos los automóviles, por lo que el Grupo Hyundai podrá cobrar un seguro por poco más de 149 millones de dólares, así que por ese lado tal parece que no les importa si se quedan ahí o se quedan en el fondo del mar.
Sin embargo, hay otra complicación: todos los vehículos tienen el tanque lleno de combustible y ahora se teme que se derrame en el mar, lo que sería un verdadero desastre ecológico, dada la cantidad de vehículos que siguen ahí, así que de todas maneras seguirán intentando las maniobras de rescate, entre las que se incluye cortar el buque en 8 partes y después llevarlo a una estación de reciclaje. Lo que no se sabe todavía es qué sucederá con los autos que se logren rescatar; tal vez los rematen, así que mantente atento a ver qué sucede.