El pasado sábado 11 de febrero fue encontrado el cuerpo de Frank Ancona, de 51 años, quien había salido de su casa el miércoles anterior y no regresaba desde entonces. Frank fue conocido por ser el líder de los “Caballeros Tradicionalistas Estadounidenses”, uno de los grupos de xenofobia y racismo pertenecientes al Ku Klux Klan.
Ancona fue miembro del KKK durante más de 30 años, y creó a los Caballeros Tradicionalistas Americanos en el 2009, por lo tanto fue nombrado por el grupo como “Mago Imperial”
Según se sabe, Ancona le había pedido el divorcio a su esposa, y por lo tanto, esta se había llevado todas las armas de fuego que él tenía en su poder, excepto su favorita. Así mismo, la mujer había publicado en Facebook que necesitaba un compañero de cuarto, pues sola no podría pagar las cuentas después de la separación.
Los hechos:
Una familia que pescaba en el río Missouri encontró el cuerpo de Frank Ancona. Este presentaba un impacto de arma de fuego en la cabeza; así que inmediatamente llamaron a las autoridades para reportar el hallazgo. Su esposa lo había visto por última vez cuando él iba rumbo a su trabajo el miércoles por la mañana, según informó Daily Journal.
Primero se consideró que había sido un secuestro y homicidio relacionado con el racismo y el rencor de alguien afectado por éste, pero las evidencias apuntaron hacia otros horizontes.
De acuerdo con datos preliminares, el crimen se produjo después de una pelea familiar, motivo por el cual se descartó que Ancona haya sido asesinado por su relación con el KKK.
Después de que el cuerpo fue encontrado, la oficina del Condado de Washington hizo la autopsia, y esta lanzó como principales sospechoso a Malissa, su esposa, y su a hijastro Paul.
Ambos fueron detenidos para llevar a cabo el proceso de investigación, y se llegó a la conclusión de que Jinkerson le había disparado mientras dormía.
Posteriormente, la madre se unió en complicidad para abandonar el cuerpo cerca de una zona despoblada, pero sus intentos de ocultar los hechos fueron en vano, ya que las autoridades encontraron amplias pruebas de sangre en casa de Ancona, en Leadwood.
Hasta ahora, ambos se han negado a esclarecer los motivos por los cuales cometieron dichos actos; sin embargo, ayer se dio una resolución de los hechos y los dos fueron acusados de asesinato.
Malissa Ann Ancona, de 44 años, y Paul Edward Jinkerson Jr., de 24, enfrentarán cargos de homicidio en primer grado, además de manipulación de evidencias y abandono de un cadáver.
Existen al menos 30 grupos del Ku Klux Klan en Estados Unidos, y Ancona era parte de una de ellas.