Las persecuciones de la policía comúnmente implican altas velocidades, pero raramente alcanzan los 200 kilómetros por hora. Y bueno, en este caso, un adolescente de Oklahoma ¡superó los 330 kilómetros por hora en un Mustang modificado! ¡Y con las luces apagadas!
Hector Fraire, de apenas 19 años de edad, fue arrestado hace una semana luego de que la policía le diera alcance. Manejaba un Ford Mustang modelo 2011. El Mustang alcanzó los 330 km/hr.
Fraire fue detectado inicialmente en un radar de la policía, corriendo a 130 k/hr en Turnpike, en Oklahoma City. La policía empezó la persecución, incrementando cada vez más la velocidad hasta llegar a los 330 km/hr.
Para empeorar las cosas, el adolescente apagó las luces en la noche para evitar ser atrapado. Los primeros persecutores no lo pudieron alcanzar, pero más adelante de él, otros policías lo interceptaron y lo obligaron a detenerse.
Según los medios, Fraire fue arrestado y acusado por conducir temerariamente y por escapar. Afortunadamente, no hubo accidentes que lamentar.