Algunos han dicho que se trata solamente de la casualidad; otros, que fueron incidentes planeados para generar más expectativa por la película; y unos más, aseguran que la película de El Exorcista es realmente una cinta maldita.
Sin duda, esta película marcó un antes y un después en el género de terror, al mostrarnos una posesión demoniaca y también, de alguna forma, le cambió la vida a quienes participaron en ella por la serie de eventos desafortunados que se suscitaron:
1. Muertes
Veamos, durante la post-producción, murieron el actor Jack MacGowran y la actriz Vasiliki Maliaros, cuyos personajes también morían en la película; también murió un experto en efectos especiales y un cuidador nocturno de los estudios Warner, quien fue acribillado a balazos.
El abuelo de Linda Blair y el hermano del actor Max Von Sydow fallecieron el día que empezaron las grabaciones. Y lo terrible fue más allá del tiempo de grabación: el hijo de Mercedes McCambridge, quien hizo la voz del demonio, mató a toda su familia en 1987, y luego se suicidó. La película tuvo tanto éxito, que se llevó al teatro, con la actriz Mary Ure, en 1975, pero un día después del estreno, la encontraron muerta; aparentemente fue una sobredosis de barbitúricos.
2. Dolor real
Linda Blair sufrió una lesión en la espalda, que la ha acompañado desde entonces, cuando el arnés usado para la escena en que se eleva encima de la cama, se rompió. Ellen Burstyn, quien interpretaba a la madre de Linda, en una escena fue lanzada por esta al suelo, y también padeció de una lesión permanente en la espalda.
Muchos de los gritos que escuchas en la película, son provocados por un dolor real.
3. El incendio
Los decorados de la que sería la casa donde se desarrolla la historia, quedaron destrozados luego de un incendio, por lo que el rodaje se retrasó durante seis semanas. Como otro dato curioso, prácticamente todo el set sufrió daños, excepto la habitación de Regan, la niña poseída…
4. Ruidos y sucesos extraños
Durante la grabación se caían focos; cintas se borraban solas; se escuchaban ruidos, pasos, voces; desaparecían objetos; teléfonos que salían volando. Toda una experiencia de lo paranormal en la filmación.
5. Un director un poco excéntrico
Por si fueran pocos los eventos atribuidos a lo sobrenatural, William Friedkin, director de la película, utilizaba algunos métodos extraños para conseguir ciertos efectos en la cinta, como abofetear de improviso al actor Father O’Malley, para tener una expresión en su rostro que estaba buscando.
También se supo que se colocó detrás del actor Jason Miller y disparó una arma real, para grabar el susto. Para los sonidos en la escena en que el demonio abandona el cuerpo de Regan, grabó una serie de sonidos, incluidos los chillidos de unos cerdos en el matadero.
6. El estreno en Roma
Cuando la película llegó a Roma, el cine estaba cerca de algunas iglesias del siglo XVI que ostentaban unas enormes cruces; mientras la gente iba llegando, se desató una tormenta y justo antes de que comenzara la película un rayo dio justo en una de las cruces y la hizo caer al suelo.
7. Un asesino en el set
Este hombre, que apareció en una escena de la película, llamado Paul Bateson, fue declarado culpable de asesinar a un hombre y era investigado por 6 asesinatos más, en los que probablemente descuartizó y metió en bolsas a las víctimas y las lanzó al río Hudson.
8. Víctimas colaterales
No fueron pocos los casos reportados de personas que se desmayaban, vomitaban, sufrían crisis de pánico, pues aseguraban que había “mensajes ocultos” en la película, que los hacían sentirse muy mal.