Seguro has escuchado la frase “Hasta que la muerte los separe”, pero esto no necesariamente se aplica a parejas, también a otros ámbitos de la vida, como el trabajo. Si no nos crees, te presentamos a Ruthie Schusther, quien ya cumplió 100 años de vida y 50 de ellos los ha dedicado a trabajar en un McDonald’s en Pittsburgh y, según ha declarado, no piensa retirarse.
Ruthie nació el 3 de marzo de 1921 y es viuda. Además, considera que la edad es solo una cuestión de números, pues todavía se siente muy fuerte, por lo que no está dispuesta a renunciar a su trabajo, como la mayoría opina que debería hacer por su edad. Esto la ha convertido en un ejemplo de vida y también de romper esquemas, pues todos esperarían que estuviera en un asilo, pero ella sigue acudiendo a su trabajo como lo ha hecho desde hace 50 años.
Por supuesto que ya es conocida entre los clientes del local, pues cada viernes por la tarde, Ruthie canta para ellos. Todo esto es lo que la ha mantenido con esa actitud tan alegre ante la vida, por eso es que no está dispuesta a dejar su empleo, lo que nos demuestra que la vida nos trata dependiendo de la forma en la que la tomemos.
Antes de la pandemia, Ruthie acostumbraba salir a bailar, que es otra de las cosas que le encantan, hasta cuatro veces por semana como si fuera una veinteañera. Por esta razón su historia se ha vuelto tan popular. Además, nos llena de esperanza, pues nos demuestra que podemos llegar a una edad tan avanzada y seguir trabajando y divirtiéndonos.
Como una forma de agradecerle, este local de McDonald’s instaló un buzón en la entrada para que los clientes dejen sus tarjetas de felicitación por el cumpleaños 100 de esta querida colaboradora.
Esta abuelita recuerda que nunca ha sido rica y, de hecho, al morir su esposo, salió a buscar trabajo para poder cubrir sus gastos y lo encontró en McDonald’s, justo cuando tenía 50 años. Ruthie afirma que con lo que gana en este restaurante es suficiente para vivir tranquila y salir a divertirse, convivir con los demás, bailar, cantar y, sobre todo, vivir. Ella es un enorme ejemplo de cómo es que debemos dirigir nuestra vida y que lo más importante no es lo que tenemos, sino las ganas de seguir siendo felices.
Me gusta trabajar. Me pagan. Pago mis facturas y eso es bueno. Nunca he tenido mucho dinero, pero siempre he tenido suficiente. Así son las cosas.
-Ruthie