OnlyFans se ha vuelto una fuente de ingresos sumamente importante para las familias que han estado batallando con su economía, o bien, mujeres que quieren reunir capital para llevar a cabo proyectos académicos y de vida, pero, a pesar de que la página y su contenido tiene altísima demanda, las comunidades se muestran intolerantes y hasta crueles con las creadoras a las que descubren viviendo entre ellos.
Una de esas creadoras es Sara Blake “Cheek”, quien desde el año pasado sufrió la discriminación por parte de la escuela de su hijo de siete años cuando le prohibieron asistir a sus partidos. Pero este 2023, la discriminación se volvió aún más abyecta y ahora han suspendido a su hijo de la escuela sin otra razón que el hecho de que su trabajo es ser modelo en la popular plataforma para adultos.
El niño ni la debía ni la temía
Sara, madre de cuatro y felizmente casada, dijo no solo no se avergüenza de su trabajo, sino que se enorgullece de lo que ha logrado como creadora de la plataforma para adultos, pues ella y su familia consideran que su trabajo es análogo al de una actriz o modelo. Otra virtud de su trabajo es que fue el medio por el que pudieron sobrevivir y medrar incluso durante los más aciagos días de la pandemia.
A pesar de que ya habían dejado caer el martillo del castigo sobre su madre debido a padres chismosos que resentían la actividad económica a la que se dedicaba Sara, ahora esto escaló aun más con la suspensión de su hijo de la escuela. Según la mamá, la única razón que existe para haber castigado a su pequeño y a su familia es que trabaja en la plataforma en línea para adultos.
Ya tenían a madre e hijo en la mira
Con el antecedente de la prohibición para asistir a los partidos de futbol de su hijo a finales del año 2022, era solo cuestión de tiempo antes de que el chisme llegara a oídos en lugares más altos dentro del tótem escolar y, a principios de este año, los padres chismosos, que miraban con malos ojos las fuentes de ingreso de Sara, reportaron a la madre ante las autoridades de las escuelas públicas del condado de Orange, disparando la sanción directa contra su pequeño de siete años.
La directora no quiso ni hablar conmigo ni darme una razón por la que sacó a mi pequeño de la escuela. Lo único que quería era hablar con ella para que tomara responsabilidad de sus acciones, pues ha demostrado que no puede hacer su trabajo de un modo imparcial: un niño merece que lo traten justamente y no que lo castiguen por algo que hizo uno de sus padres. La escuela simplemente ‘graduó’ a mi hijo de sus aulas y tuvimos que darle educación en casa para compensar el tiempo perdido. Ahora está inscrito en otra escuela pública.
-Sara Blake