Sabemos que existen personas que no creen en la pandemia de coronavirus y por ello no toman en cuenta las medidas sanitarias, pero cuando ya están presentando síntomas de la enfermedad y aún así persisten en conductas de riesgo, entonces las autoridades tienen que imponer un castigo que sea ejemplar y no haya más personas que hagan lo mismo. En Alemania una mujer identificada como Yasmin, militar estadounidense que se encuentra destacamentada en ese país europeo, tenía síntomas de la enfermedad y aún así se fue de fiesta.
Esta mujer de 26 años tomó unas vacaciones en Grecia y al regresar a Alemania presentó síntomas como dolor de garganta, y a pesar de que se encontraba a la espera de los resultados de la prueba de Covid-19 decidió que era un buen momento para irse de parranda, y ya sabemos que con unos tragos encima es difícil seguir observando las medidas preventivas para no contagiarse. Eso fue justamente lo que sucedió en este caso y ahora Yasmin tendrá que responder por sus actos.
En esta ocasión la mujer no solo se llevará un regaño de parte de las autoridades, sino que el fiscal de Múnich abrió una investigación para determinar su responsabilidad en los cargos de daño corporal y negligencia, así que de ser cierta la acusación deberá responder ante las autoridades e ir a la cárcel. Además, le aplicarán una buena sanción para ver si así se les quitan las ganas a quienes siguen sin tomar en cuenta las medidas preventivas. Por su parte, Peter Messerschmitt, propietario del club Peaches, a donde Yasmin llegó divertirse, la calificó como “un asesino potencial”.
Se estima que tan solo esta mujer pudo haber contagiado a 750 personas con las que tuvo contacto, y por ello es que las autoridades están analizando con mucha seriedad la investigación en la que Yasmin tendrá que explicar qué fue lo que sucedió y, claro, afrontar las consecuencias de sus actos, aunque esto signifique tener que pasar diez años dentro de una prisión. Seguro que en este momento la chica rebelde se está arrepintiendo de lo que hizo.
El ejército de los Estados Unidos en Baviera mantiene a sus soldados y civiles, así como las ordenanzas bávaras con respecto a limitar la propagación del virus a un alto nivel. Cualquier violación de estas regulaciones sería inconsistente con nuestro comportamiento y nuestros esfuerzos por mantener seguras a nuestras comunidades. Nuestro enfoque principal está actualmente en la identificación completa y precisa de las personas de contacto, así como en pruebas adicionales para limitar la posible propagación del Covid-19.
—Don Wrenn, vocero de los Estados Unidos
Sin duda, este es un duro mensaje para todos aquellos que persisten en su actitud de no protegerse y por lo tanto están poniendo en riesgo a su familia y a todos en general, ya que pueden provocar un brote masivo que sea imposible de controlar. Desafortunadamente no ha pasado todavía la pandemia, así que es momento de seguir extremando precauciones para que se reduzcan los contagios y, por supuesto, las muertes, pero de esta manera va a ser muy difícil.