Eva María García Dávila fue una persona desinteresada y amante de los animales, tanto que cuando le llegó el momento de partir de este mundo, su última voluntad estuvo dirigida al prójimo.
En lugar de flores para su velorio, la mujer originaria de Reynosa, Tamaulipas, en México, pidió que, en el contexto de su velorio, se reuniera alimento para animales, pues así resultaría en un beneficio para quienes amaba.
Última voluntad: ayudar
Los sobrinos y demás familia de Eva María, Lorena García, Jesús Miguel, Paola Luna, Laura García Dávila, Julia García y Eva García, se dispusieron a cumplir con la voluntad de la noble mujer, cargando los costales de comida en una camioneta.
Las croquetas fueron dispuestas para ser entregadas a la organización Mundo Animal Reynosa, la cual se encargaría de usarlas del mejor modo posible, distribuyéndolas entre los animales que se dedican a rescatar a diario.
¡Tanto amor!
¡Cuánto debe haber amado a los animales como para pensar en ellos hasta el último día de su vida, y que ese amor se extienda más allá aún!
En su cuenta de Facebook, la organización Mundo Animal Reynosa hizo una breve semblanza de su benefactora y agradeció a su familia, que se encargó de reunir y hacer llegar la ayuda que Eva María deseaba hacerles llegar.
Mundo Animal Reynosa
Este alimento está bendecido y nosotros compartiremos esa bendición con quien más lo necesita; será entregado a nuestras compañeras rescatistas que atienden callejeritos a diario.
En verdad, no tenemos palabras para expresar lo que sentimos después de tan hermoso gesto. Gracias, Sra. Eva, gracias.