Una mujer polaca reveló el porqué dejó de rasurarse y prefirió la opción velluda. Básicamente es porque decidió revelarse ante las presiones de la sociedad para que la gente sea suave al tacto y a la vista.
Sonia Cytrowska de 28 años, vive en Polonia y decidió empezar depilarse el vello en el cuerpo cuando tenía 12 años, debido a que las imágenes que veía en la televisión y las revistas la hacían sentir insegura.
Pero el año pasado, decidió alejarse de las rasuradoras y depiladoras. Desde entonces, no ha vuelto a tocar una, apoyada por su esposo, quien dice que le tomó un poco de tiempo acostumbrarse a su nuevo look.
Ahora, ella espera que sus publicaciones constantes en Instagram, impulsen a otras mujeres a dejar la opresión de las navajas, mediante el movimiento bodyhairmovement, que combate los estereotipos de belleza.
“Elegí no rasurarme porque me veo bella y es muy confortable vivir de esa manera, pero claro que hay días en los que me pregunto porqué debo luchar contra los estereotipos y porqué soy tan necia.
“Pero también recibo muchos mensajes de muchas mujeres que están en el mismo punto que yo hace un año. Hablo con ellas, a veces les mando fotos y nos apoyamos mutuamente”.
Sonia dice que normalmente pasaba hasta 3 horas por semana tratando de remover su vello corporal de sus brazos, ombligo y piernas.
Admite que para su esposo Tobiasz, ha sido difícil acostumbrarse a su apariencia natural, pero que su amor ha conquistado cualquier confusión que pudiera tener en su cabeza.
La mujer de 28 años, explica: “miraba otras cuentas que apoyan el vello en el cuerpo y para mí fue mucho más fácil empezar mi nuevo estilo de vida velludo, con apoyo de otros, tanto hombres como mujeres”.
“En casa con mi esposo y mis amigos me siento segura y aceptada. Pero es difícil todavía cuando conozco gente nueva tener qué dar explicaciones”.
“Me he estado rasurando desde los 12 años y toda mi vid me he sentido mal, menos que otras mujeres porque ellas no tenían tanto vello en su cuerpo”.
Asegura que inició a publicar en su cuenta de Instagram porque cree que las mujeres no deben sentirse mal por su vello.
“En un principio mi esposo se sorprendió porque me conoce de hace 8 años y siempre me vio rasurar todo mi cuerpo, de hecho prefiere mi apariencia rasurada pero hemos habado mucho, le expliqué porqué es importante para mí vivir con mi apariencia natural y decidió aceptarme y apoyarme”.
Sonia admite que hay días en los que duda y siente ceder ante la presión de verse de cierta manera, pero espera que las redes sociales puedan darle fuerza y ayudar a otras mujeres a entender que es normal y muy bello tener muchos vellos.
“Mi sueño más grande es ver mujeres rasuradas y mujeres que no se rasuran en las calles de las grandes ciudades, ambas aceptándose porque lo que hagan con su cuerpo es su elección”.