Luego de pasar por Turquía, Azerbaiyán y Rusia, Mevan Babakar logró llegar junto con su familia a los Países Bajos, donde encontraron refugio luego de tener que salir huyendo de Irak.
Además de la seguridad que encontraron en ese país, la pequeña recibió una muestra de cariño que le cambió la vida: un hombre de origen neerlandés le regaló una bicicleta. A través de Twitter, Mevan, ya convertida en una mujer, emprendió la búsqueda de este hombre…
Hi internet, this is a longshot BUT I was a refugee for 5 yrs in the 90s and this man, who worked at a refugee camp near Zwolle in the Netherlands, out of the kindness of his own heart bought me a bike. My five year old heart exploded with joy. I just want to know his name. Help? pic.twitter.com/XzUgHzllYb
— Mevan Babakar | مێڤان (@MeAndVan) August 12, 2019
Hola, Internet, esto es una posibilidad remota, PERO fui refugiada durante 5 años, en los años 90, y este hombre que trabajaba en un campamento de refugiados cerca de Zwolle, en los Países Bajos, por la amabilidad de su corazón, me compró una bicicleta. Mi corazón de cinco años explotó de alegría. Solo quiero saber su nombre. ¿Me ayudan?
Ahora, con 29 años, decidió ir de vacaciones a Zwolle, el lugar donde estuvo refugiada, y le pareció un buen momento para visitar a ese hombre que le regaló la bicicleta, así que la comunidad de Internet se puso a ayudarle.
Arjen van Der Zee, un hombre que trabaja en un noticiero local, lo reconoció pero tampoco recordaba su nombre hasta que preguntó a sus amigos y conocidos, quienes lo identificaron como Egbert.
For those wondering here what five year old Mevan looked like. This was my fifth birthday in the refugee camp in Zwolle. She doesn't even know that an incredible bike is coming her way aaaany day now! pic.twitter.com/caZ6NGFh55
— Mevan Babakar | مێڤان (@MeAndVan) August 12, 2019
Para aquellos que se preguntan cómo era Mevan, de cinco años. Este es mi quinto cumpleaños en el campo de refugiados en Zwolle. ¡Ella ni siquiera sabe que una bicicleta increíble viene en camino en cualquier momento!
Gracias a varias personas fue posible concretar el reencuentro de estos dos amigos, que a pesar del tiempo y la distancia han permanecido vivos en sus recuerdos de esa época difícil, pero por el apoyo y el cariño pudieron salir adelante.
A final photo, with a rare smile! Photo credit goes to @Arjen78. One for the mantlepiece, I think. pic.twitter.com/IcZEv3JtlQ
— Mevan Babakar | مێڤان (@MeAndVan) August 15, 2019
Pequeñas acciones pueden tener grandes consecuencias. La amabilidad que me mostraron Egbert y su familia me acompañará toda la vida, y eso me sigue formando como persona. Eso es lo mágico de la amabilidad, no cuesta nada y cambia el mundo de una persona en un momento.
Durante la reunión compartieron anécdotas y Egbert le mostró su colección de orquídeas; Mevan comentó:
Creo que estaba conmocionado, al igual que yo. Fue como ver a un familiar al que no había visto desde hacía mucho. Encantador.
Finalmente acordaron mantenerse en contacto y ya están planeando una nueva visita, pero ahora también con la madre de Mevan. Una historia realmente encantadora que nos recuerda la importancia de nuestras acciones, porque siempre tienen consecuencias, y qué mejor que sean positivas.