El sábado 28 de junio una aficionada provocó un grave accidente en la primera etapa del Tour de Francia y aunque ese día se dio a la fuga, finalmente fue arrestada y ahora enfrentará las consecuencias de su imprudencia.
A 45 kilómetros de la meta en la localidad de Landerneau, la mujer vestida con impermeable amarillo sostenía un cartel de apoyo a los ciclistas, pero la aficionada atravesó su anuncio en el camino del ciclista alemán Ton Martin y cuando él chocó con el letrero, perdió el equilibrio y cayó al suelo, lo que generó una caída masiva de los deportistas.
Al ver lo que provocó, la mujer huyó del lugar y la policía comenzó una investigación para identificarla e iniciar un proceso penal en su contra, pues muchos ciclistas sufrieron lesiones moderadas y otros tuvieron heridas más serias que los dejaron fuera de la competencia.
El director adjunto del Tour De Francia, Pierre-Yves Thouault, anunció que la mujer ya fue arrestada en la localidad de Landerneau y aunque no reveló datos sobre ella, dijo que tendrá que pagar una multa por causar este accidente.
Según información de RTL, la cantidad de la multa asciende a más de 1700 dólares. Sin embargo, esto podría aumentar si los ciclistas presentan una denuncia contra ella.
Entre los lesionados que tuvieron que abandonar la competencia están Ignatas Konovalovas, Cyril Lemoine, Jasha Sütterlin y Marc Soler. Si ellos deciden denunciar a esta aficionada, las consecuencias podrían ser más graves para ella, pues enfrentaría cargos por “violar deliberadamente las normas de seguridad y causar lesiones que podrían impedir que alguien trabaje hasta por tres meses”.
En cuestión de segundos casi 60 ciclistas terminaron mordiendo el polvo debido a la falta de prudencia de una aficionada, quien por apoyar al deporte acabó protagonizando un negro capítulo en la historia del ciclismo.