En las situaciones de naufragio, las víctimas suelen sufrir situaciones extremas en las que su supervivencia se ve puesta en duda, pues, usualmente, sus recursos son limitados y se presentan condiciones que conducen a sufrimiento psicológico por aislamiento, así como la incertidumbre que nace de la posibilidad de nunca volver a casa y de la sombra de la muerte sobre uno. Aun cuando sobreviven, los náufragos pueden sufrir secuelas, incluyendo síndrome de estrés postraumático, así que no es poca cosa estar sujeto a una situación cercana a la muerte como esta. Un hombre acaba de sobrevivir, contra todo pronóstico, a un naufragio de 24 días y lo logró del modo más insospechado.
Elvis Francois, de 47 años, oriundo de República Dominicana y residente de la porción neerlandesa de la isla de San Martín en el mar Caribe, se encontró arrastrado mar adentro a bordo de una embarcación en la que se encontraba para arreglar el motor. Sin deberla ni temerla, el hombre se encontró solo, perdido y solamente con cátsup y condimentos como sustento. Tres semanas y tres días después, las autoridades costeras colombianas lo rescataron, pero él admite que muchas veces estuvo a punto de perder la esperanza.
El recate de Elvis: lo bueno es que sabían inglés
El bote en el que se encontraba Elvis fue descubierto desde el aire por la guardia costera colombiana a unos 222.24 kilómetros al noreste de la península de La Guajira, la más septentrional de Sudamérica y que está ubicada entre el extremo nororiental de Colombia y el noroccidental de Venezuela. Para localizarlo fueron instrumentales los esfuerzos del náufrago, quien intentó llamar la atención de la aeronave de la guardia con el reflejo de un espejo y la palabra “HELP” (“AYUDA”, en inglés) que fue tallada por él sobre la cubierta de la nave para atraer la atención de cualquier potencial rescatista.
Aunque durante su primera vuelta, el avión pasó de largo, la Marina comenta que lo vieron cuando pasaban de regreso. Según autoridades, la petición de ayuda en la cubierta fue instrumental para reconocer la situación. El comandante Carlos Urbano Montes, capitán de navío del grupo de guardacostas del Caribe, dio a conocer a la prensa los pormenores de la supervivencia del náufrago y abundó que el destino de la embarcación en la que encontraron a la víctima fue abandonada en el mar luego de que un barco mercantil rescatara a Elvis, pues la logística de rescate de la nave era impracticable en el momento.
“Celebrando” Navidad y Año Nuevo perdido y asustado
Según Elvis Francois, a finales del año pasado, allá por el 22 de diciembre, se encontraba realizando trabajos de reparación y mantenimiento a un velero, cerca del área holandesa de la isla de San Martín, donde dice que tiene su residencia, cuando, repentinamente y sin aviso, las corrientes empezaron a llevarse a la embarcación donde trabajaba a mar abierto. Sin conocimientos de navegación u operación del bote, el astillero no pudo conducir la embarcación de vuelta a la costa.
El hombre vio como única opción comunicarse con sus amigos en la costa, a quienes llamó, pero a pesar de que brevemente intentaron responderle, eventualmente, se perdió la señal y Elvis se resignó a que no había otra opción más que esperar. Aunque no llegaría a casa a tiempo para la cena de Nochebuena ni para el festín de Año Nuevo, pero al menos algo tuvo de comer.
Una dieta terrible, pero peor es nada
Durante las tres semanas y tres días que duró el infierno marítimo de Elvis, el hombre tuvo que achicar agua del bote para evitar que se hundiera e intentó, infructuosamente, encender fuego para mandar señales de humo a quien pudiera rescatarlo. La supervivencia del hombre solo fue posible debido a que en el velero había cátsup, sal de ajo y cubitos de condimento Maggi, que mezcló con agua de lluvia, que logró recolectar con un trapo, para obtener sustento durante su prolongada odisea. Racionar sus alimentos le permitió durar tanto como lo hizo.
Estuvo gacho, pero colorín colorado, este chavo se ha salvado
El dominicano aseguró que pasar casi un mes perdido en el mar sin un hilo de optimismo o señales de posible ayuda fue mucho más devastador de lo que uno podría imaginarse. Sin nadie con quién hablar, sin idea de qué hacer, sin ningún indicio de que hubiera seguridad de sobrevivir para ver otro amanecer, debe haber requerido toda su fuerza para seguir adelante y su agradecimiento hacia la Guardia Costera es patente: “Estoy en deuda con la Guardia Costera, pues de no ser por ellos, no habría vivido para contarla”.
La Marina colombiana aseguró que Elvis Francois fue inspeccionado médicamente una vez que se encontró en tierra firme el 16 de enero de 2023, en Cartagena de Indias, Colombia, y que dicha revisión tuvo como resultado que se encontraba en buen estado de salud a pesar de las supuestas condiciones extremas que había tenido que soportar durante casi un mes. Incluso cuando parece raro que esté bien de salud, el náufrago aseguró que perdió una porción considerable de su peso en el trance en que se vio envuelto. Según reportes, el hombre ya fue entregado a las autoridades de migración, quienes dicen que se encargarán de ayudar al náufrago a regresar a su hogar.