Los tatuajes tienen mucha demanda y sus precios varían de acuerdo a su extensión. En pocas palabras, los tatuajes cuestan su buen trabajo y esfuerzo y el que no se quiera pagar por ellos constituye un robo, como le ocurrió a una artista que terminó siendo estafada.
A través de un video, la usuaria @leidymora_666 se hizo viral, pues muestra a unos tortolitos que le armaron todo un teatro solo para irse sin pagar el trabajo de la tatuadora colombiana. Las redes sociales opinaron “A esos ladrones y farsantes habría que meterlos a la cárcel”, pero la artista se comunicó con la chica que tatuó y se puso de acuerdo con ella para ponerle fin al asunto.
¿Qué se traen estos? Ve y diles algo…
En el video podemos ver a Leidy Mora junto a una colega en la trastienda de su estudio de tatuajes Pura Vida Bogotá, donde escuchan una tremenda confrontación que estaba teniendo lugar en su estudio de tatuajes, que subió de tono hasta el punto de hacer que las trabajadoras del local se aventaran a ver qué estaba pasando.
Cuando Leidy llamó a la puerta con los nudillos, un estrépito de cristales se escuchó del otro lado del umbral. Con la seguridad de que tenía que hacer algo al respecto, entró llamando a sus clientes y pidiéndoles calma, pero ellos la ignoraron y siguieron con su discusión hasta que rompieron. Acto seguido, el novio se retiró del lugar, dejando al negocio y a su ex con el detallito de los daños y el pago pendiente.
“A mí no me interesa quién lo va a pagar, tengo mis propios problemas”
Cuando le preguntaron quién iba a realizar la compensación por los daños y el pago del trabajo realizado, la clienta solo dijo “Yo vine a hacerme un tatuaje con mi novio, pero él no se lo va a hacer porque me dejó aquí. ¿Qué hago? No voy a pagar nada”. Obviamente, la tatuadora tomó esto con incredulidad y le reviró “Pero si yo ya he hecho el trabajo, tú tienes que pagarme”.
A mí no me interesa quién lo va a pagar, acabo de tener un problema. ¿No te das cuenta?
-Clienta antes de marcharse del local
Las redes sociales opinan: la policía debió agarrarlos
Las redes sociales inmediatamente opinaron que todo se había tratado de plan con maña y que las habían querido marear con todo el show para no pagar por el tatuaje y que les saliera gratis. Además, los usuarios dijeron que lo primero que debieron hacer cuando andaban con el pleito y se negaron a pagar fue “llamar a la policía”.
En un video posterior, la tatuadora aclaró que se puso en contacto con la chica que se rehusaba a pagar y que finalmente le hizo una mínima restitución por los daños causados durante su accidentada visita. Leidy Mora dijo que ella también creyó que todo había sido un teatro para birlarle el trabajo, pero que luego se dio cuenta de la situación de la chica, que era más complicada que eso.
Según lo que la clienta le dijo, los chicos tenían una relación de cuatro años, con un hijo, pero él la había estado engañando por seis meses y tenía a otra chica embarazada. Sin embargo, él lo negaba, por lo que, para demostrarlo, fue a tatuarse con ella, pero él se arrepintió cuando ya le había hecho el tatuaje a ella y la dejó plantada. La artista corporal le aceptó el pago de 16 dólares, que no cubría ni el tatuaje ni el espejo, pero lo dejó por la paz.
La actitud de Leidy Mora fue de conciliación, pues dijo que no quería meterse en problemas legales ni hacer denuncias. Además, ella también aclaró que la gente siempre está viviendo situaciones que uno ni se imagina y que sus clientas a veces tienen moretones u otros signos de violencia doméstica, por lo que prefiere perder un poquito que ser despiadada e inflexible con otra mujer, aunque la haya perjudicado.