A todo el mundo le gustan las selfies, sobre todo a los orangutanes. Y quedó demostrado cuando un simpático orangután se robó la cámara GoPro de un fotógrafo dedicado a la conservación de los orangutanes en Borneo… para tomarse selfies.
El fotógrafo llamado Ian Wood es fotógrafo profesional de vida salvaje y ha estado fotografiando orangutanes durante más de 10 años. Cuando pensó en obtener fotos distintas, decidió esconder una cámara GoPro en el hábitat de los orangutanes.
Así fue como en su viaje más reciente al parque nacional Tanjung Puting, encontró fotos inesperadamente cercanas.
“Había decidido esconder la cámara GoPro cerca de donde los orangutanes aparece, esperando obtener algunas imágenes de ángulo amplio y de cerca. Imaginé que en el peor de los casos, si un orangután encontraba mi cámara se daría cuenta de que no es comida y la dejaría”, dijo.
Pero un orangután de 3 años de edad mostró tanto interés que sorprendió al fotógrafo y a todos los demás. “Mis emociones se convirtieron en preocupación cuando vi que se la metió a la boca, no por mi cámara sino porque se pudiera ahogar”.
“Luego de romper la pantalla LCD se la sacó de la boca y acidentalmente se tomó cientos y cientos de fotos presionando el botón principal. Yo veía por mi iPhone, el cual había conectado con la conexión Wi-Fi. Luego de 30 minutos corrió con ella a un árbol”.
Eventualmente, el orangután se cansó de tomar foto y dejó la cámara caer al piso. Entonces más tarde, Ian la recuperó. “Quedé asombrado cuando vi las imágenes y encontré que había muchas fotos bastante decentes”.
El área ofrece una luz de esperanza para la protección de esta especie y según Ian, se han plantado más de 22 mil árboles para ampliar el bosque. El viaje fue financiado por Orangutan Foundation UK e iban otras 6 personas guiadas por Ian para fotografiar la vida salvaje y ayudar a recolectar fondos para la conservación del área.