Con el paso del tiempo, los oficios y profesiones en el mundo han ido evolucionando hasta toparnos con lo que ahora tenemos, desde ingenieros, hasta herreros y trabajadores de la construcción.
Sin embargo, en otras épocas, por las mismas necesidades de su tiempo, había otros oficios o tareas por realizar que nunca te imaginarías que existían.
Por eso aquí te presentamos 17 de los oficios más bizarros e increíbles de creer. Algunos de ellos pudieran resultar placenteros aún, pero otros caen en lo ridículo e inimaginable.
1. Planificador de orgía romana
En la Antigua Roma, existían los encargados de planificar todos los aspectos de estos eventos sexuales. Incluía la lista de invitados, la comida y la ubicación de las orgías.
2. Ladrón de cadáveres
Estos ladrones se encargaban de desenterrar cuerpos recién sepultados y luego venderlos a las facultades de Medicina. Sin duda un oficio muy morboso.
3. Barbero-cirujano
Las peluquerías de los años de 1500 eran sólo un poco diferente a las actuales. En lugar de simplemente cortar el cabello, entre sus múltiples tareas también eliminaban los piojos, quitaban dientes y aplicaban análisis de sangre.
4. Recolector de ratas
En la época victoriana, había gente que recibía pago por vagar por las calles de Londres y capturar a las ratas. Por lo regular utilizaban veneo o perros terrier para ayudar a atraparlas.
5. Revendedor
El revendedor -o tejón- iba a comprar productos a los agricultores y los llevaba al mercado común para venderlos a todo el mundo que los deseara.
6. Chico de la pólvora
Si un muchacho joven en un buque de guerra tenía manos rápidas, podría ser requerido para las recargas de los cañones. A ellos se les denominaba los chicos de la pólvora.
7. Frenólogo
Actualmente se considera una pseudociencia en el mundo actual. Los Frenólogos eran personas que podían “leer” tu inteligencia por la forma de tu cabeza.
8. Ornatrices
Estos fueron el equivalente a esteticistas o cosmetólogos en la Antigua Roma. Un ornatrice era contratado para garantizar que los miembros de la nobleza siempre lucieran bellos y estuvieran usando las últimas tendencias de la moda.
9. Cargador de litera
Los carruajes provocaron que esta manera de transportarse fuera obsoleta, en la que cuatro hombres cargaban a una persona dentro de un contenedor portátil.
10. Colocador de bolos
Antes de que existieran las máquinas que recolocaban automáticamente los bolos derribados, existían los pinsetter que hacían este trabajo de forma manual.
11. Saca-perros de iglesias
Puede sonar algo aburrido, pero estos trabajadores -llamados Knock Knobbler en inglés- se dedicaban en tiempos isabelinos a sacar perros callejeros de las iglesias.
12. Mozo del retrete
Estos sirvientes ayudaron al rey cuando iba al baño. Aunque podría ser un pésimo empleo, el mozo recibía su propio lugar en la crte del rey, con todo y sus beneficios.
13. Repartidor de carne para gato
Los gatos de las familias ricas gozaban de una gran alimentación diariamente gracias a sus repartidores de carne. Ellos acudían a los mataderos para recoger restos de carne que posteriormente llevaban a los gatos mimados.
14. Recolector de sanguijuelas
Cuando la flebotomía era considerado un tratamiento médico, existían los recolectores de sanguijuela que las capturaban con patas de animal para venderlas a los “médicos” de aquellas épocas.
15. Lector
Como todo un ávido lector, estos trabajadores debían leer las noticias en voz alta varias veces al día a otros empleados. Todo sea por estar al día con la lectura.
16. Cortador de hielo
En tiempos pasados no se contaba con la tecnología de un refrigerador de la actualidad para conseguir hielo. La gente tenía que ir a los lagos a cortar bloques o contratar a un cortador de hielo para que se encargara de esta tarea.
17. Computadora
Antes de que existieran computadoras como la MacBook Pro o Dells, había seres humanos que realizaban todas las tareas ahora relacionadas con una laptop. De hecho, la NASA suele contratar a personas que hagan el trabajo de “computadora”. Esta industria ayudó a generar cálculos mentales durante horas y sin errores.