Se nos olvida que no todos tenemos las mismas oportunidades y que algunas personas tienen que hacer esfuerzos extra para tener una educación y cubrir sus gastos.
José Cruz Ayala Martínez es un estudiante de 17 años, que cursa la especialidad de mecánica industrial en el CBTIS 107 en Oaxaca, México, y que empezó a vender tortas y dulces a sus compañeros de preparatoria. Lo hacía por tener un ingreso para sus gastos y no pedirle dinero a sus padres, pero el jefe de servicios escolares de esta preparatoria quiso decomisarle su bolsa.
Como el estudiante no la entregó, lo sacaron de la escuela. José Cruz tenía que entregar una tarea y volvió a la preparatoria —ya sin la bolsa— pero el guardia de la entrada le dijo que tenía instrucciones de no dejarlo pasar. El jefe de servicios volvió a encarar al alumno y lo agarró del brazo y la camisa para echarlo de ahí de una forma violenta.
Después llamaron a los padres del estudiante y les exigieron que firmaran una acta administrativa, culpando a José Cruz de vender productos en la escuela. La mamá y él se negaron a firmar porque en ningún momento les mostraron la parte del reglamento donde se decía que no estaba permitido.
Toda la escuela se enteró de lo que había pasado y el director del CBTIS le ofreció a José Cruz y su familia una disculpa oficial. También prometió tomar cartas en el asunto y sancionar al jefe de servicios por tener esa actitud tan agresiva.
José Cruz quiere ser piloto aviador y para pagar sus estudios está ayudando en el taller eléctrico de su padre. También por eso es que comenzó a vender tortas y dulces en su escuela. Gracias a que su historia se hizo noticia en internet, la Preparatoria Carlos Fuentes ya le ofreció una beca de estudios completa.
Él sabe que cumplir su sueños será costoso, pero no piensa rendirse y su esfuerzo merece ser recompensado.