Existen dos clases de fama: la que ganas por un noble esfuerzo, y la que obtienes cuando haces una gran tontería. ¿Cuál creen que se ganaron estos gemelos con la payasada de fingir un asalto?
Como una muestra más de que los influencers y tiktokers son capaces de cualquier cosa con tal de aumentar el número de sus seguidores, esta vez Alex y Alan Stokes, de 23 años de edad, cruzaron la línea con su nada inocente broma en California.
Este par de “estrellas de las redes sociales” se disfrazaron con ropa negra, pasamontañas y unas mochilas cargadas de billetes. Hacían sonar un ruido como de alarma de banco, y salían corriendo por las calles haciéndose pasar por ladrones que se quedaron sin su vehículo de escape.
Obviamente fueron varias personas quienes hicieron llamadas a los servicios de emergencia, pensando que sí eran criminales. Pero el colmo del mal gusto fue cuando los gemelos subieron a un coche del servicio Uber y le pidieron ayuda al conductor para “escapar del lugar del crimen”.
El chofer les pidió que bajaran de su vehículo, pero después de que ellos se fueron la policía lo detuvo a él y lo hicieron descender de su coche a punta de pistola. También los oficiales creyeron que era un cómplice de este supuesto robo, pero él explicó lo que había pasado y lo dejaron ir.
Cuando la policía finalmente encontró a los gemelos los detuvieron, pero al ver que todo era falso los dejaron ir solo con una advertencia. Esto sucedió en octubre del 2019; sin embargo, ahora el fiscal de distrito del Condado de Orange: Todd Spitzer, comenzó un proceso legal contra los Stokes.
Estos son delitos que podrían haber resultado en que alguien resultara gravemente herido o incluso muerto. Los agentes del orden público han jurado proteger al público y cuando alguien llama al 911 para denunciar un robo a un banco activo, van a responder para proteger vidas. En cambio, lo que encontraron fue una especie de intento retorcido de ganar más popularidad en internet al poner innecesariamente en peligro a miembros del público y policías.
Cada uno de los gemelos fue acusado de detención falsa con violencia, amenaza, fraude e informar falsamente de una emergencia. ¿Querían ser criminales? Pues ya lo son, y si el juicio falla en su contra podrían enfrentar una pena de hasta cuatro años en prisión.
Esto es lo que pasa cuando una broma muy pesada se le sale de las manos a la generación que tiene mucha “creatividad” pero nada de sentido común.