Dicen que el tiempo no pasa en vano; lo vemos en nuestras arrugas, canas, el dolor de rodilla, pero también lo podemos notar en las cosas que nos rodean, en los zapatos que usamos o en la taza en la que tomamos café. El tiempo no perdona.
Para que esta reflexión tome más sentido, hemos recopilado una serie de poderosas imágenes que lo dejan muy en claro. Tal vez no lo notemos, pues tenemos otras ocupaciones, pero es interesante prestarles atención a esos pequeños detalles…
1. Después de 15 años por fin se compró unas botas nuevas
2. 26 años durmiendo con el mismo osito
Le regalaron el mismo osito una Navidad. Durmió con uno de ellos durante 26 años y el otro lo guardó.