Hay héroes que viven entre nosotros, no siempre lo notamos porque a veces son pequeñas acciones las que hacen que este mundo sea mejor para todos, pero, sin duda, hasta las más pequeñas historias valen la pena contarse.
Naude Dreyer es un kayaker de 36 años que tiene una misión en la vida: combinar su pasión por el mar y salvar al planeta. Su nombre es cada vez más conocido pues ha salvado delfines y focas de trágicos finales, muchos de ellos relacionados con la contaminación de océanos y mares.
Recientemente, el nombre de Dreyer fue aplaudido por haber salvado a más de 600 focas, un trabajo que no ha sido sencillo pues muchas veces los animales sufren cuando son retirados restos de desechos plásticos de su cuerpo.
Su misión fue concebida mientras surfeaba en las aguas de Pelican Point, en Namibia, lugar donde Naude solía dar paseos en kayac a turistas. Aunque su negocio sigue en pie, su objetivo en la vida parece haber cambiado y ahora dedica su tiempo a salvar la vida de tantos animales como le sea posible y evitar que los peligros de la contaminación lleguen a ellos.
Usando cualquier herramienta improvisada a su disposición, Naude persigue a las focas para cortar los apretados cables alrededor de sus cuellos. Muchas veces estas redes les causan heridas profundas, así que él y su equipo esperan que los animales logren sobrevivir en la naturaleza.
Hace como seis años noté que más y más focas se enredaban en la basura, así que empecé a perseguirlas para ayudarlas. Lo logré, así que seguí haciéndolo y formé un grupo de rescatistas con los que he rescatado más de 600 animales.
Al parecer las focas pequeñas encuentran los restos de plástico y juegan con ellos, algunos se enredan y crecen con el plástico alrededor de sus cuerpos, lo que les causa laceraciones que terminan, en el peor de los casos, por matarlos.
Los salvo porque nadie más quiere hacerlo, y ellos no pueden salvarse a sí mismos.
Naude espera que su ejemplo llegue a más y más personas que, si bien no se unirán a su equipo, al menos tomen conciencia y dejen de contaminar el medio ambiente, así como espera que existan regulaciones severas para pescadores que dejan sus redes en el mar.
“Los gobiernos deben poner más presión sobre la industria pesquera, y las personas deben aprender a llevarse la basura a casa”.