Un hombre perdió la vida tras ayudar a una familia de patos a cruzar una intersección en California, Estados Unidos. Después de hacer la buena acción del día, el varón se dirigía a su auto, pero lo que parecía ser un buen día para él y los otros conductores se volvió una tragedia, pues al estar a unos metros de su auto, fue embestido por un vehículo conducido por una adolescente. El héroe de los patos perdió la vida en el lugar.
Casey Rivara, de 41 años, regresaba a casa después de recoger a sus hijos Sophia, de 11 años, y James, de 6 años, de la práctica de natación en Rocklin, a unos 40 kilómetros de Sacramento, California. En una de las intersecciones, el hombre se detuvo, pues vio una madre pato tratando de cruzar a sus patitos por la vialidad. Casey no dudó en bajar de su coche para ayudar a las aves a llegar al otro lado.
Los otros conductores cooperaron en la buena acción, pues, a pesar de tener el semáforo en verde, esperaron a que los patos y Casey estuvieran a salvo. Todos reconocieron el trabajo de Casey y le aplaudieron mientras regresaba a su coche. Sin embargo, otro coche que se aproximaba a la intersección no se percató de lo que pasaba y arrolló al hombre. La conductora, de 17 años, se quedó en el lugar de los hechos. La policía continúa con las investigaciones y la adolescente no ha sido multada ni arrestada.
A pesar de que el servicio de paramédicos intentó reanimarlo, el hombre había perdido la vida instantáneamente. Fue un momento trágico para los testigos, incluidos sus hijos. William, un testigo de 12 años, tomó fotografías del rescate de los patos con su teléfono celular y explicó para KCRA 3 de NBC que su madre bajó la ventana para decirle “Buen trabajo, buen trabajo”, pero un segundo después, el auto lo golpeó.
William y su hermana no asistieron a la escuela el 19 de mayo, pues estaban molestos por cómo se desarrollaron los hechos y el trauma que les generó. La madre del pequeño incluso consoló a los hijos de Casey, quienes aguardaban en el auto y preguntaban por su padre. William expresó que el amable hombre “no se merecía esto, pues fue la única persona que salió del auto y trató de ayudar a las aves.
Casey era un padre amoroso, comenzó a trabajar en la escuela de sus hijos para pasar un poco más tiempo con ellos. El cariño de familiares y amigos se vivió en su funeral, al que acudieron muchas personas, quienes le llevaron flores y patitos de goma para recordar su gran acto desinteresado. Tracey Rivara, tía de Casey, abrió una campaña de GoFundMe para recaudar fondos destinados a la familia de su sobrino.
Queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento a todos ustedes por los amables mensajes y gestos de amabilidad. Es realmente aleccionador escuchar cómo Casey ha impactado positivamente en sus vidas, y estamos extremadamente agradecidos por eso.
—Angel Chow, viuda de Casey Rivara