Un hombre de 70 años de edad que luchaba contra el cáncer en etapa terminal, abandonó el hospital en el que estaba siendo tratado porque quería fumar cannabis una última vez.
El paciente, Patrick Ford, afirmó que el personal de la residencia de enfermería de Drumconner en Westbourne, Bournemouth, Reino Unido, le dijo que no se le permitiría fumar en la clínica a pesar de que sus días estaban contados, por lo que tomó la decisión de hacer valer su más anhelado deseo.
Su mejor amigo, David Warnock, de 56 años, dijo que visitó a su camarada y que esperaba fumar con él, pero rápidamente fueron interrumpidos por miembros del personal. David dijo:
Teníamos un ventilador junto a la ventana para que el humo saliera fácilmente, pero nos lo quitaron. Había estado deseando inhalar ese humo de hierba.
David se apresuró a señalar que Patrick y él entienden las leyes en el Reino Unido, pero que tal vez debería haber excepciones.
Aceptamos que fumar cannabis es ilegal, pero este es el deseo de un moribundo. Tiene el derecho como ser humano de hacer lo que quiera en sus últimos días de vida.
Patrick, que sufre de esquizofrenia y fue diagnosticado con cáncer terminal en diciembre del año pasado, ha fumado cannabis durante más de 15 años, usándolo como un analgésico.
Dijo que ahora pasará el resto de sus días en su apartamento, donde podrá escuchar su música favorita de los años 60.
¡Feliz viaje amigo!