El cáncer es una de las más terribles enfermedades que existen y el tratamiento para vencerlo es caro y doloroso. Es por eso que quienes logran superarlo se merecen una justa recompensa por su esfuerzo y valor.
Ronnie Foster fue diagnosticado con cáncer de colón en enero y desde abril iba a su tratamiento de quimioterapia que estaba dando buenos resultados. Este hombre de Pink Hill, Carolina del Norte, iba de camino a su última sesión en el hospital y se detuvo un momento en una tienda Short Stop en Beulaville para comprar un boleto de lotería instantánea Win It All.
Este jubilado del Departamento de Transportes compró un”raspadito” que le hizo ganar cinco dólares. La fortuna lo llamaba y él compró otros dos boletos. En el primero no tuvo suerte, pero en el segundo se ganó 200,000 dólares. Qué buena suerte:
Vi todos esos ceros y me congelé. No lo creí hasta que se lo di al empleado del mostrador para que lo escaneara. Cuando lo vio me dijo “Ve a la sede de la lotería”, comencé a temblar. No podía creerlo.
Foster fue a su última sesión de quimioterapia y días después fue a reclamar su premio. Quitándole los impuestos, al final él se llevó un total de 141,501 dólares. Si le restaron mucho dinero, pero aun así no está nada mal. Venció el cáncer y además ganó miles de dólares, todo el mismo día.
Este hombre, doblemente afortunado, usará su premio para cubrir algunos gastos médicos que todavía tiene pendientes. A pesar de que tiene un buen seguro, aún hay facturas por pagar y después va a ahorrar lo que le quede.
Curiosamente, los boletos de Win It All van a ser descontinuados en noviembre así que Foster tuvo demasiada suerte porque ganó el último gran premio que estaba disponible en esta lotería instantánea:
Ya estaba feliz porque era mi última ronda de quimioterapia. Ganar esto lo convirtió en mi día de suerte.
Enfrentar y vencer una enfermedad como el cáncer requiere de mucha fortaleza y el universo premió a Foster por su esfuerzo. Recibió lo que merece y nosotros lo felicitamos por su valor y por su suerte.