Un hombre “astuto” se las ingenió para obtener dinero de una manera muy peculiar. Resulta que el individuo pidió la devolución en efectivo de una TV que ni siquiera había comprado; y lo sorprendente fue que ni siquiera necesitó un ticket de compra. Y es que simplemente, cuando se le pidió un recibo, audazmente caminó hasta el gerente de la tienda de Aldi, en Lincoln para hacer tiempo y persuadir al cajero.
La policía está buscando a un hombre que logró estafar a una tienda con un televisor que recogió del mostrador, lo llevó a la caja y procedió a pedir un reembolso.
En su página oficial de Facebook, la policía de Lincolnshire ha publicado desde entonces imágenes de las cámaras de la tienda en el momento del incidente, con la esperanza de rastrearlo.
Los oficiales dijeron que el hombre fue a hablar con el gerente, le estrechó la mano y regresó al cajero, quien creyó que se había dado el permiso para realizar el reembolso.
Después de ver la interacción, el cajero asumió que era correcto lo que el hombre estaba solicitando, por lo que no fue necesario pedirle el ticket de compra. Aun que tal vez por vergüenza, el vocero de Aldi se negó a comentar el incidente.
El hombre recibió 352 dólares a cambio de nada y se fue campante del lugar.
No fue hasta más tarde que el personal se dio cuenta de que había sido una estafa e informó a la policía inmediatamente.
Una mujer llamada Jennifer Jane, de Harrogate, North Yorkshire, dijo que algo similar ocurrió en su tienda, Sainsbury’s:
“Una mujer se acercó a servicios al cliente con una aspiradora pesada y le preguntó si podía dejarlo con ellos mientras traía su coche a la entrada. -Por supuesto, no había ningún problema. Lo recogió y se marchó con un limpiador de más de 125 dólares que no había sido pagado”.
Por su parte, el estafador sigue suelto y disfrutando de su dinero, mientras que la policía sigue publicando las fotografías para dar con el paradero de este astuto pillo.