No hay luz sin oscuridad y la bondad de Santa Claus tiene su equilibrio debido a su contraparte aterradora, bestial e infernal: Krampus, el demonio de la Navidad que nadie querría ver bajando por su chimenea.
Además de celebrar el día de Navidad el 25 de diciembre como en la mayoría del resto del mundo, en los países cercanos a los Alpes existe otra fecha relacionada con una figura espeluznante que castiga a los niños que se portaron mal. Krampus es el demonio decembrino con apariencia de cabra, largos cuernos y enormes dientes, que tiene como misión ayudar a San Nicolás de una forma escalofriante.
Estos son 10 datos interesantes que debes saber para conocer más sobre este infernal personaje. Esperamos que ninguno de nosotros esté en la lista de “niños malos” para no recibir la visita de Krampus…
1. El día del Krampus
Según las tradiciones de los países alpinos, el Krampus visita la casas de los niños que se han portado mal la noche del 5 de diciembre, pero el 6 de diciembre es su festividad oficial en la que se organizan desfiles con personas disfrazadas como este demonio.
2. Aterradora apariencia
Aunque han existido diferentes versiones a través de los años, hay elementos de Krampus que varían poco, como sus cuernos, grandes colmillos, su pelaje y cola.
3. Es amigo de Santa Claus
Mientras que San Nicolás se encarga de llevar regalos y alegría a los niños que se portaron bien, Krampus es quien les deja carbón o ramas secas pintadas de oro a los chicos desobedientes, que no se comen sus verduras, que mienten o hacen travesuras. Así que estos personajes no son enemigos sino las dos caras de la misma moneda.
4. Celebraciones infernales
En los desfiles organizados el 6 de diciembre, las personas disfrazadas de Krampus salen a las calles, equipados con ramas de abedul o látigos y “castigan” con golpes a los espectadores.
5. Las patas del Krampus
Debido a sus cuernos y pelaje, por algún tiempo se asoció a este personaje con el Diablo y es por eso que en muchas de sus versiones aparece con una pata de cabra y un pie humano deforme con garras.
6. La vigilancia del demonio
Las ramas secas pintadas de oro que lleva el Krampus a las casas supuestamente deben servir de decoración y, entonces, se convierten en un símbolo de su presencia, así como un recordatorio para que los niños sepan que él, como San Nicolás, también los está vigilando y anotando todas sus malas acciones.
7. Máscaras costosas
Se cree que la creencia en Krampus data de la era precristiana y como se trata de una tradición muy antigua, existen máscaras muy viejas que fueron usadas en su celebración. En algunos museos de países como Alemania, Austria, Eslovaquia y República Checa hay máscaras de madera muy valiosas que representan a este demonio.
8. El resurgimiento de una oscura celebración
Aunque la Iglesia Católica prohibió la representación y festividades de este demonio, a partir del siglo XIX en varias naciones se retomó la tradición de la noche del Krampus y cada vez va ganando más adeptos. Esta oscura celebración incluso ha llegado a América y en las ciudades más grandes de Estados Unidos ya es común el desfile de este personaje.
9. Krampus cancelado
Un ejemplo de la prohibición de las festividades relacionadas a Krampus ocurrió en los años de 1934 a 1938, mientras Austria estaba bajo un régimen fascista. Como era un símbolo del pecado y anticristianismo, las personas que se disfrazaban de este demonio eran arrestadas.
10. Origen
Se cree que el nombre de Krampus proviene del término alemán Krampen, que significa garra, y que genealógicamente pertenece a los dioses nórdicos. Este demonio es hijo de Hela o Hel, descendiente de Loki y que rige el mundo de los muertos.