Volver a las calles de forma segura se ha estado convirtiendo en un reto, pues los negocios y comercios tienen que encontrar la manera de mantener una sana distancia entre su clientela.
Ya sea instalando paneles entre las mesas de los comensales o usando meseros robotizados, la idea es evitar la aglomeración y el tumulto así que en París están empleando a unos ayudantes gigantes y esponjosos: una horda de adorables muñecos conocidos como “los duendes ositos de peluche”.
Porque en Francia la elegancia es lo primero, y después la utilidad, en los cafés de París colocan a estos peluches enormes de osos en las sillas de las mesas como si fueran otro comensal más. Así es como logran que las personas se mantengan al menos a un metro de distancia, que es la medida sanitaria en las tierras del vino y el queso.
Así es como se impone una buena medida de sanidad, y al mismo tiempo se crea una imagen de postal. Estos “duendes ositos” son toda una atracción en París, y suelen aparecer de pronto en los lugares menos inesperados.
Como esta divertida idea se hizo virales en las redes sociales, ahora más cafés, librerías y otros establecimientos están imitándola. Así que durante algún tiempo las personas van a tener que aprender a convivir con estos peluches acompañantes.
Claro que no solo en París saben cómo mantener una sana distancia con mucho estilo. En otros lugares ya están usando gorros con tubos de hule-espuma o mesas choconas personalizadas, pero sin duda la idea de los osos es la más adorable.