La búlgara Vangelia Pandeva Dimitrova, mejor conocida como Baba Vanga, tuvo una gran influencia en el mundo al ser seguida por millones que creían en sus capacidades de clarividencia, que, según ellos, le permitían echar vistazos al futuro a pesar de ser ciega. La mujer y sus dones han sido estudiados por los aciertos que llegó a tener antes de su muerte en 1996 y al ser gente precavida, no está de más estar atentos por si sus predicciones para 2023 llegan a cumplirse porque son terroríficas y nos atañen a todos.
Las predicciones de la mística jamás tuvieron un registro oficial y ordenado que nos permitiera prevenir todas las eventualidades de las que habló durante su periodo de actividad, pero si le damos crédito a lo que sus palabras nos deparan a futuro, 2023 podría ser un año muy agitado con eventos que podrían cambiar al mundo, como una descomunal tormenta solar, el cambio en la órbita de la Tierra, la normalización de la eugenesia científica, ataques con armas biológicas e incluso el advenimiento de una invasión alienígena. De ser cierto, las cosas no pintan bien, aunque, por lo menos, 2023 no será nada aburrido.
Para los no creyentes
Todo eso de las predicciones y las visiones a futuro quizá no sea de lo más fácil de creer para la mayoría, pero nos podemos remitir a las pruebas para hablar de la efectividad de las visiones de la búlgara que se han hecho públicas. Estas fueron el atentado del 9/11, el ascenso de Barack Obama como presidente de los Estados Unidos y el Brexit, sucesos ocurridos ya bastante después de su fallecimiento. Además, entre los clientes que buscaron sus servicios de clarividencia se encontró Leonid Brézhnev, un líder soviético tan exitoso como trágico.
1. Por si Chernóbil no fuera suficiente: otra tragedia nuclear
La catástrofe de Chernóbil fue una de las tragedias más terribles de la historia reciente y la radioactividad derivada de la explosión de la planta de energía nuclear aún permanece como testimonio viviente de su venenosa influencia en nuestro mundo, que seguirá lastimando a la Tierra aún cuando nosotros nos hayamos ido. Baba Vanga dijo que podemos esperar otra tragedia similar en 2023. Muchos creen que la invasión rusa podría ser el preámbulo a esta tragedia porque, a final de cuentas, los vestigios de la tragedia de Chernóbil aún viven en Ucrania, pero solo nos queda esperar que no sea así.
2. El fin de la vida como la conocemos: Cambio en la órbita de la Tierra
Quizá suene a algo menor, pero, literalmente, el cambio en la órbita de la Tierra cambiaría nuestro mundo como lo conocemos, afectando todos los ecosistemas, los ciclos naturales y, claro, las estaciones, la temperatura, etc. Aunque la creencia popular es que este cambio podría ser causado por un desastre nuclear global, la verdad es que las energías gravitacionales que deberían verse alteradas para mutar la órbita de la Tierra serían demasiado colosales para que esa nimiedad las provocara, pero, quién sabe, quizá alguna fuerza cósmica podría decidir usarnos de piñata.
3. De vuelta a la Edad de Piedra: Una devastadora tormenta solar
Las tormentas solares tienen que ver con las emisiones electromagnéticas provocadas por alteraciones en la superficie del sol, que al viajar a través del espacio, pueden causar tremendos efectos sobre aparatos electrónicos en la Tierra, provocando apagones y destrucción de algunos aparatos que no están protegidos contra esas anomalías. Sin embargo, una marejada solar como la que predijo la búlgara podría tener repercusiones globales sobre la infraestructura eléctrica y electrónica de todas las naciones, provocando apagones que durarían años. Básicamente nos pondría de vuelta a donde estábamos antes de la Era Electrónica, acabando con muchos beneficios de la tecnología actual.
4. La versión belicista de escupir hacia arriba: Armas biológicas
Aunque las armas biológicas están prohibidísimas en todo el mundo por su alta impredecibilidad, peligrosidad y, básicamente, porque podría significar que todo el mundo, no solo los “enemigos”, terminaría diezmado, Baba Vanga tuvo una visión en la que un “gran país” lleva a cabo pruebas con una de estás terribles armas apocalípticas. Por supuesto, existen muchas grandes naciones que tienen recursos que permitirían desarrollar este tipo de atroces tecnologías, pero esperemos que no tengamos que sufrir a futuro una versión hecha en laboratorio de la pandemia que acabamos de sufrir tan larga y amargamente.
5. Lo único que nos faltaba: Invasión extraterrestre
Según la mística, luego de que el mundo se viera cubierto en oscuridad, tendremos una invasión extraterrestre. Probablemente, la invasión no sea tan cómica y colorida como la versión noventera de Mars Attacks de Tim Burton, pero ojalá tampoco sea aburrida como la de Señales (2002) de M. Night Shyamalan. Vamos, si vamos a tener que enfrentarnos a hombrecitos verdes en 2023, por lo menos cabría esperar que la cosa sea interesante, aunque no nos revelen los secretos del universo o algo así.
6. Cuando la Matrix nos alcance: Bebés de tubo
Y, por último, la adivina vio un futuro en el que los bebés ya no nacían como tales, sino que era creados en laboratorios. Hace no mucho, un artista visual y cinematográfico logró imprimir esta realidad en una propuesta que es parte de su proyecto de difusión tecnológica y causó tanto interés como terror. Simplemente esperemos que esto no sea, efectivamente, lo que nos espera, aunque, según Baba Vanga, eso es precisamente lo que viene.