En la guerra contra las plagas los seres humanos tenemos muchas batallas ganadas, pero no podemos llevarnos siempre la corona de la victoria, y esta fue una pelea que tuvo un final explosivo, literalmente.
El escenario de esta lucha entre un hombre y una mosca fue la comuna Parcoul-Chenaud, en Dordoña, Nueva Aquitania, Francia. Aquí, un abuelo pensionado de 80 años de edad —que se mantiene anónimo— estaba tranquilamente en su hogar cuando una mosca empezó a revolotear por su cabeza.
A pesar de su edad, este anciano es un hombre moderno, así que en lugar de eliminar al insecto con el clásico periodicazo fue a buscar un matamoscas eléctrico y lo encendió. Lo malo fue que no se había dado cuenta de que en su hogar había una fuga de gas… Así que en cuanto prendió el aparato se encendió una pequeña chispa eléctrica que fue suficiente para detonar una explosión, tan fuerte que hizo saltar una parte del techo y destruyó la cocina.
Por suerte los servicios de emergencia llegaron a tiempo, trasladaron al pensionado hasta un hospital en Libourne, y logró salir de esta explosión solo con una quemadura en su mano. Sin embargo, su casa todavía se encuentra en reconstrucción y aún no puede volver.
Deshacerse de insectos puede resultar muy peligroso, sobre todo cuando se quiere recurrir a los últimos inventos que las personas no dominan del todo. La pregunta que todos nos hacemos es si la mosca en cuestión al menos sí fue aniquilada.