En un intento de algo que parecía ser gracioso, un youtuber llenó de cemento el interior de un microondas y posteriormente metió su cabeza… Cinco bomberos llegaron al lugar para auxiliar al chico y liberarlo del tormento que él mismo propició.
Bien dijo el eminente científico Albert Einstein: “dos cosas son infinitas: la estupidez humana y el universo; y no estoy seguro de lo segundo”.
Todos hemos hecho o pensado en hacer cosas verdaderamente estúpidas intentando imitar al gran Johnny Knoxville y a su séquito de amigos idiotas que emprendían aventuras en las que sus vidas pendían de un hilo.
Pero este joven de 22 años de Fordhouses, Wolverhampton, planeó usar el microondas y siete bolsas de cemento. El objetivo era que sus amigos voltearan el aparato sobre su cabeza y así se creara un molde.
Aunque la cabeza del chico estaba protegida por una bolsa plástica, los jóvenes no midieron el peligro de que el protagonista podía morir asfixiado.
Afortunadamente sus fosas nasales no fueron bloqueadas del todo, batalló para poder respirar durante los 90 minutos que estuvo atrapado en su propia creación antes de que el cuerpo de bomberos llegara al auxilio. Él solamente disponía de un angosto tubo que sus amigos le colocaron para ayudarlo a tomar aire.
Los bomberos lograron deshacer una gran parte del cemento solidificado con un destornillador, lo que permitió al hombre respirar más fácilmente. Sin embargo, tenían que ser precisos y cautelosos con la herramienta, ya que al encontrarse la cabeza a centímetros de distancia, podrían haber apuñalado o arañado al joven.
El comandante Shaun Dakin, que estaba a cargo del equipo de bomberos que respondieron al incidente, hizo hincapié en que, aunque la situación de aquel chico era graciosa, el peligro en el que se encontraba no lo era. Y dijo:
Por muy gracioso que parezca, este joven podría haberse sofocado o haber sufrido una lesión grave. Quitar el microondas fue complicado, porque estaba bien atascado. Llamamos por videollamada a nuestros colegas de rescate técnico para que nos dieran consejos y finalmente logramos que se despegara.
Nos llevó casi una hora liberarlo. Todo el grupo involucrado se disculpó mucho, pero esto fue claramente una llamada que pudo haber evitado que ayudemos a alguien más en una necesidad genuina y accidental.
Estamos muy impresionados.
Cinco de nuestros bomberos estuvieron trabajando durante una hora esta tarde, liberando a un bromista de YouTube cuya cabeza había sido ‘cementada’ dentro de un horno de microondas.
Nos gustaría pensar que estos chicos aprendieron una valiosa lección.
Porque te queremos… No intentes algo similar.